Se produjo, por tanto, un uso partidista de unas cantidades que no llegaron a Marbella hasta que
el PP recuperó la alcaldía en el verano de 2017 con una moción de censura.
Los dos años anteriores, el Gobierno de Rajoy
hizo oídos sordos a las peticiones del entonces alcalde, el socialista
José Bernal.
No fue hasta 2018, en la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado para 2019, cuando se incluyó
una disposición adicional que permitió que el dinero de las causas judiciales por corrupción volviese a Marbella.
Se estableció una doble vía. Por un lado, con los
bienes embargados, bien entregándolos directamente al Ayuntamiento o el dinero conseguido con su venta.
Por otro, entregando
las multas a través de la firma de un convenio, algo que se hizo a finales de 2018, ya con el Gobierno de Pedro Sánchez, y significó
2,7 millones para las arcas municipales.
Pero, en los dos años (2015 a 2017) en los que al frente del Ayuntamiento hubo un tripartito formado por PSOE, IU y OSP, el PP se negó a que el dinero volviera.
Fue el 30 de julio de 2015 cuando se hizo firme en el Tribunal Supremo la
sentencia del caso Malaya, en la que la Audiencia Provincial de Málaga había pedido que Marbella pudiera recuperar el dinero robado.
A partir de ahí,
José Bernal como alcalde empezó a reclamar. La primera rueda de prensa en la que se habló del asunto fue a
primeros de septiembre de 2015.
Pocos días después, el PSOE presentó
varias enmiendas, durante la elaboración de los Presupuestos del Estado para 2016, para que el dinero de Malaya volviese a Marbella, pero el PP
las rechazó todas.
El
22 de septiembre fue el entonces concejal de Hacienda,
Manuel Osorio (OSP), el que viajó al Ministerio de Hacienda para reclamarlo, también sin éxito.
Bernal insistió en pedir que lo recuperado viniese en aquel momento a Marbella en forma de planes de empleo y hasta llegó a alcanzar
un acuerdo con el
ministro Cristóbal Montoro, que la cúpula del PP echó para atrás.
Era evidente ya a esas alturas que los populares no iban a permitir que el
nuevo gobierno del cambio, que había desaloja a Muñoz de la alcaldía, pudiese disponer de cantidades importantes para invertir.
La postura del PP y de la concejala de la oposición y senadora, Ángeles Muñoz, fue que esas cantidades contribuyeran a
recortar plazos de la deuda del municipio con la Seguridad Social y Hacienda.
Así se aprobó y se vendió la ciudadanía como todo un logro. Muñoz llegó incluso a destacar la "sensibilidad" del
Gobierno de Rajoy en aquel momento.
Durante los dos años de José Bernal como alcalde
nada llegó a Marbella y no fue hasta que, tras la moción de censura, volvió a tomar el control del Ayuntamiento el PP, cuando el Gobierno de Rajoy cambió de actitud.
Este jueves, la alcaldesa, sin ruborizarse,
ha criticado con dureza al PSOE por hacer lo mismo que hizo su partido entonces, negar que el dinero de Malaya venga directamente a Marbella.
Según Muñoz, los socialistas "vuelve a actuar contra los intereses de Marbella” por haber votado en
el Senado en contra de la enmienda que había presentado.
"Siempre ocurre que cuando los socialistas gobiernan ni apoyan, ni invierten, ni creen en Marbella”, ha llegado a decir. Tampoco su partido creyó en la ciudad hasta que recuperó la alcaldía.