El juicio a la denominada trama sueca, que arrancó el pasado martes en la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares, se ha trasladado este lunes al edificio en la
calle García Gutiérrez de la capital madrileña.
Se ha producido la primera testifical solicitada por la
Fiscalía Antidroga para tomar declaración a uno de los policías que investigó la causa y que se ha centrado en la figura de Joakim Broberg.
Marbella24horas ha seguido esta segunda sesión del juicio, al igual que la primera, el pasado martes, y las próximas que se vayan produciendo.
Identificado por su número profesional, el inspector ha ofrecido esta mañana detalles que sitúan en una posición muy difícil al hijastro de la alcaldesa de Marbella, al que ha situado como
enlace entre proveedores de droga y la mafia sueca.
Ha ido desgranando las investigación desde su orígenes y realizado afirmaciones contundentes, fruto del trabajo que ejecutó desde 2019.
"Mientras la investigación avanza, somos capaces de confirmar que lo que está haciendo Joakim Broberg es
abasteciendo a organizaciones que acuden a él para adquirir estupefacientes", ha señalado.
Considera este especialista policial que "las organizaciones suecas estaban en ese momento tratando de establecer contacto con
proveedores españoles y lo hacen utilizando a personas como Broberg, que tiene contactos entre clientes y proveedores".
El policía fue también rotundo a la hora de adjudicar el papel en la trama al hijastro de Ángeles Muñoz.
Ha señalado que se dedicaba a negociar la
compra de droga con los clientes, a los que les enseñaba muestras, y que posteriormente era otro de los acusados, su hombre de confianza, Roberto Bayona, el que hacía la entrega.
Entre un movimiento y otro, contactaban con su proveedor, apodado "El Rubio", que les facilitaba los estupefacientes.
Este testimonio coloca ya desde el inicio en una posición complicada al hijastro de la alcaldesa de Marbella como intermediario en el tráfico de droga.
Inicio de la investigación
Este inspector que ha declarado como testigo ha señalado que la investigación arrancó a raíz de unas vigilancias que
pidieron desde Suecia a personas que estaban en Barcelona.
Ha destacado que se trataba de organizaciones suecas
muy violentas y que habían realizado al menos tres asesinatos.
Una de las personas a las que se siguió desde el inicio es Anders Nilson, al que se localiza en
un ferry entre Tarifa y Tánger, con Joakim Broberg.
"Deciden entrar por separado, lo que nos hace pensar que viajaban juntos, pero no tenían intención de que no se les relacionara", ha dicho el investigador.
"A partir de ese momento, Joakim Broberg empieza a ser
objeto de investigación y comienzan las vigilancias sobre él", ha añadido.
En esos primeros seguimientos, detectan que el hijastro va acompañado "de manera habitual" por otra persona que identifican como
Roberto Bayona y que, después, comprueban que también viajaba en el citado ferry.
Ante estos primeros descubrimientos, y que Broberg "podía tener relación con las
actividades delictivas investigadas", se intensifican las vigilancias.
El inspector ha relatado que también confirmaron la compra de tarjetas telefónicas en locutorios. "Es Broberg el que accede, dos ocasiones en un mismo día, y compra las tarjetas", ha dicho.
"Somos capaces de identificar las líneas telefónicas que están utilizando y confirmamos que varias de ellas corresponden a
comunicaciones encriptadas", añade.
El investigador ha señalado que eran tarjetas holandesas con numeración especial que impedían registrar las comunicaciones.
"Broberg utilizaba una de ellas", ha señalado ante la aclaración que le ha pedido la fiscal sobre quién tenía estos dispositivos.
La Fiscalía Antidroga pide
22 años de cárcel para el hijastro de la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, por tráfico de drogas, blanqueo y cohecho.
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