El
24 de julio de 2014, la entonces alcaldesa, Ángeles Muñoz, anunció de manera triunfal que el Ministerio de Medio Ambiente había dado luz verde a la rehabilitación del cargadero de mineral.
Pero el semáforo se puso pronto en rojo, porque las obras estaba previsto que comenzaran en octubre de ese mismo año y a día de hoy todavía no han arrancado, después de constantes promesas e incumplimientos.
Hay que recordar que los trabajos los iba a realizar la empresa pública Tragsa y que el presupuesto era de 76.000 euros. Se esperaba que la torre estuviese lista poco antes de las pasadas elecciones municipales, aunque no fue así.
Ya en
marzo de 2015, el responsable de la Demarcación de Costas en Málaga, Ángel González, no ofreció plazos para el inicio de las obras.
El siguiente paso en este cúmulo de despropósitos llegó el 30 de julio de 2015, ya con el PP en la oposición municipal, cuando su concejal Carlos Alcalá, durante el pleno, anunció las obras para octubre, ahora de 2015.
Durante el pleno, el edil dijo que el "proyecto está aprobado definitivamente" y que las obras estaba previsto que comenzaran en junio, aunque no ha podido ser así por el verano. "Al igual que los espigones de San Pedro Alcántara, se harán en octubre, tras la temporada estival", ha señalado.
Obvia decir que, una vez más, se le tomó el pelo a los ciudadanos, porque ni torre de El Cable ni espigones. Ya por esa época, la previsión era que el Gobierno arreglara el cargadero de mineral y después lo cediera al Ayuntamiento que ocuparía de su mantenimiento.
El
25 de octubre de 2015, desde el Consistorio anunciaban que esa cesión tendría lugar a primeros de 2016, algo que tampoco ha ocurrido porque siguen pendientes las obras que debe primero realizar el Gobierno.
Nuevo plazo
Dos años han pasado desde el anuncio de Ángeles Muñoz, pero ahora hay un nuevo plazo, el próximo mes de septiembre, otra vez después de la temporada alta de verano como en los casos anteriores.
Desde el Ayuntamiento, el concejal de Sostenibilidad, Miguel Díaz, ha señalado a
Marbella24horas que la situación la tiene que "desbloquear" la Demarcación de Costas y que para ello solo falta "voluntad política".
"Lo que nosotros debíamos hacer desde Marbella ya está resuelto, que era solicitar la concesión de la torre, porque el Gobierno quiere desprenderse de ella", señaló Díaz.
Eso sí, a manos municipales debe llegar rehabilitada, con una actuación de saneamiento. "Esto le corresponde a Costas y se trata de realizar un arreglo superficial", dijo, algo comprometido desde hace dos años.
El concejal insistió en que el Ayuntamiento ahora mismo no puede hacer nada y que es necesario que actúe el Gobierno, arregle la torre y la ceda al Consistorio, que se ocupará de su mantenimiento y de una reforma más en profundidad.