La promotora lleva pendiente desde hace más de una década de que se desarrollen los terrenos con un
Plan Parcial de Ordenación (PPO), cuya aprobación inicial tuvo lugar el 19 de enero de 2007, en tiempos de la Gestora.
Ahí comenzó un largo proceso que debía
haber concluido en 2015 con el visto bueno definitivo, pero que después se vio afectado por la
anulación del Plan General de 2010.
La tramitación urbanística fue objeto de polémica cuando en el
pleno de octubre de 2015 para al aprobación definitiva del PPO los grupos municipales de Costa del Sol Sí Puede (CSSP) y del PP
se abstuvieron.
En un primer momento, se pensó que el proyecto había quedado paralizado por ello, pero después el Secretario señaló que era suficiente con la
mayoría simple de los tres partidos del entonces equipo de gobierno (PSOE, IU y OSP).
Llamó mucho entonces la atención que el PP, que había realizado toda la tramitación desde su llegada a la alcaldía en junio de 2007, no lo apoyase desde la oposición.
El proyecto se tuvo que reajustar posteriormente al
PGOU de 1986 y esta mañana la empresa promotora ha anunciado que
se han iniciado las obras de la primera fase del proyecto.
Se trata del
Grupo Gailur, un grupo empresarial familiar del
País Vasco con más de cincuenta años en el sector, que apuesta por primera vez por Andalucía como zona de inversión.
Cabe resaltar que la empresa constructora será Gailur Taldea, que pertenece también al grupo, lo que garantiza los tiempos y calidades de la promoción.
El complejo residencial, que contará con
28 viviendas, cuyos precios oscilan entre los 940.000 hasta los 3 millones de euros, supondrá una inversión total de
50 millones de euros.
Los terrenos se encuentran junto a la N-340, frente al Coral Beach, en plena Milla de Oro de Marbella
Se estima que la
fecha de entrega será el último trimestre de 2022. La segunda fase se encuentra ya en vías de estudio para su posterior ejecución.
El grupo inversor ha confiado en
Engel & Völkers Marbella como comercializadora exclusiva, que ya cuenta con numerosas reservas, según han explicado esta mañana.
Benalús ofrecerá servicio de spa, piscinas privadas y comunitarias, solárium común, gimnasio y chill-out.
Todo ello rodeado de 7.000 metros cuadrados de zonas verdes protegidas de Cañada Real, que será de disfrute público.