El proyecto del vivero municipal de Marbella se anunció
hace dos años, tiempo en el cual no se ha puesto en marcha, hasta que el pasado mes de abril, en un comunicado, se anunció otra vez a bombo y platillo.
Este jueves, de nuevo se ha vuelto a vender por parte de la alcaldesa y se ha informado de que las
obras pueden estar culminadas en la "segunda quincena de septiembre".
Muñoz ha recordado que la “flor de temporada, a la que destinamos cada año para compra unos
200.000 euros, es una de las principales cartas de presentación de nuestra ciudad”.
“Por este motivo entendíamos que debíamos ser capaces de
autoabastecernos de manera sostenible”, ha indicado.
El ahorro alcanza una media de poco menos de un euro por cada ejemplar, por lo que el cultivo de casi 600.000 plantas supondrá que ese ahorro se sitúe alrededor de los 500.000 euros en cada ejercicio en relación con el volumen de producción anual previsto.
Pero lo cierto es que, como hemos informado, el Ayuntamiento está tramitando, ya
por tercera vez tras quedar en dos ocasiones desierto, un
concurso para contratar a una empresa privada que suministre "material vegetal y de vivero".
El presupuesto base de licitación es de
509.000 euros el primer año y luego se contemplan hasta cuatro prórrogas, que elevarían el total a
2.545.000 euros hasta 2027.
La empresa que ya ha sido seleccionada es
Viveros Guzmán, la única que se ha presentado, y el contrato se firmará en breve.
Cuando Muñoz dice que el Ayuntamiento compra cada año flores por valor de 200.000 euros es absolutamente falso.
El anterior contrato, como ya informó
Marbella24horas en enero de 2019, que se firmó con Viveros Guzmán, supuso un gasto de algo más de un millón de euros por tres años, a razón de 330.000 al año.
Ahora ese importe se va a elevar aún más, para alcanzar el
medio millón de euros por ejercicio.
Las cantidades se han ido disparando, porque
en 2018 el contrato se adjudicó a Viveros Gutiérrez en 185.000 euros, de los cuales 20.000 euros eran para San Pedro Alcántara y lo demás para el resto de término municipal.
Por tanto,
no existe ningún ahorro porque, pese a tener el vivero municipial, se va a firmar el contrato por 2,5 millones de euros en cinco años con una empresa privada.