Muñoz sigue en la trinchera de los espigones y el paseo marítimo para intentar tapar sus escándalos, muchos de los cuales continúa todavía a día de hoy sin explicar a la ciudadanía.
Esta mañana, nueva
visita propagandística, sin ningún beneficio para la ciudad, de un consejero del PP en la Junta de Andalucía, en este caso para buscar la confrontación con el Gobierno central.
El consejero
Fernández-Pacheco ha mostrado su rechazo al proyecto que pretende legalizar algunos tramos del paseo marítimo de Marbella pero, sobre todo, retranquear el saneamiento.
Como ya explicamos, es una iniciativa similar a la que
hizo el Gobierno de Rajoy, con la ministra García Tejerina, y que al final terminó impulsando el de Pedro Sánchez.
Entonces Muñoz no dijo nada, pero ahora insiste en su campaña sobre la
supuesta demolición del paseo marítimo y rechazando la legalización.
Según el consejero, el Ministerio de Transición Ecológica querría “la demolición de parte de este paseo que es emblema del municipio y que supone
un gran atractivo turístico, algo que irremediablemente nos preocupa y nos ocupa”.
Además, se ha mostrado dispuesto a la solicitud del Ayuntamiento para obtener una
concesión del paseo marítimo y evitar así las obras.
“Vamos a estudiar en profundidad el expediente de concesión de
Dominio Público Marítimo Terrestre que ha iniciado el Ayuntamiento de Marbella y lo tramitaremos con la mayor brevedad y diligencia posible para ayudarles en la defensa de estas instalaciones", ha dicho esta mañana.
El consejero ha exigido al Gobierno de España que “reconfigure ese anteproyecto y posibilite que Marbella, sus ciudadanos y las miles de personas que lo visitan cada año sigan disfrutando de este maravilloso paseo marítimo”.
La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz,
ha insistido en sus mentiras, que no duda en repetir una y otra vez.
“Es una barbaridad y un sinsentido que el Gobierno central pretenda
demoler esta infraestructura, que supone uno de los grandes atractivos turísticos, con el perjuicio que eso supondrá para la ciudad”, ha dicho.
Sobre este asunto no se puede olvidar que
Jesús Gil construyó de forma ilegal en 1992 el tramo del paseo marítimo entre la Bajadilla y el Ancón, que se sitúa dentro del Dominio Público Marítimo Terrestre.
La actuación que prevé el Gobierno contempla el
retranqueamiento del saneamiento, que pasaría a ir bajo el paseo marítimo, con una inversión de 1.183.828 euros.
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