Prudencia en el Ayuntamiento de Marbella a la espera de que concluya el plazo que se dio el pasado mes de marzo, aunque la institución municipal y la autonómica no quieren dejar pasar el tiempo y ya tienen prevista una reunión para la próxima semana.
Hay que recordar que en marzo, la APPA puso el 31 de julio como “fecha límite” para que la empresa NAS Marbella presentara el proyecto de construcción de dicha ampliación, requisito imprescindible para el inicio de las obras y en el que ya llevan un retraso de casi cuatro años.
De no hacerlo así antes de esa fecha “se procederá a iniciar procedimiento de resolución de contrato”, decía la advertencia enviada por la Junta.
Por tanto, llega el momento de actuar y así lo ha reconocido esta mañana, a preguntas de los periodistas, el alcalde durante un acto en San Pedro Alcántara. "Analizaremos las circunstancias con los datos que tenemos y veremos cuál es la solución que vamos a dar", ha dicho.
"Si vemos factible seguir en la línea actual lo haremos y, si no, se abrirá expediente para recuperar la concesión, nosotros apostamos por una obra de las mismas características", añadió.
Bernal insistió en que existen inversores interesados en retomar el proyecto, pero que todo pasa por "un gran acuerdo" entre las partes, tanto la empresa del jeque, la administración judicial y el nuevo inversor que se determine.
"No queremos crear falsas expectativas ni tomar decisiones sin que las conozcan todas las partes", concluyó el alcalde.
La idea del Ayuntamiento, como ya es conocido, es encontrar una "solución pacífica", según declaró el concejal de proyectos estratégicos, Javier Porcuna, a este digital en una entrevista el
pasado mes de febrero.
El tripartito pretende que el jeque se eche a un lado y facilite un cambio de accionariado para que pueda acceder sin problemas el nuevo inversor.
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