El posicionamiento del PP esta mañana en el pleno ordinario de enero ha sido muy llamativo porque llega en plena polémica por los cargos de confianza que han logrado quedarse como personal laboral indefinido tras reclamar ante
los juzgados de los Social.
Ya en agosto de 2015, el nuevo equipo de gobierno anunció la puesta en marcha del reglamento orgánico del régimen jurídico de los coordinadores y directores generales.
Era una normativa que quería poner orden en este tipo de nombramientos que tantos problemas habían generado ya en la etapa anterior como en el caso, por ejemplo, de Baldomero León.
Al PP nunca le gustó este reglamento, trató en todo momento de pararlo y lo consiguió a través de la Abogacía del Estado, que logró la suspensión cautelar de la normativa ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) el año pasado.
Ahora, el equipo de gobierno ha llevado esta mañana al pleno una modificación de algunos artículos de ese reglamento para ponerlo definitivamente en marcha. El tripartito y CSSP han votado a favor tras alcanzar un acuerdo, mientras que el PP lo ha hecho en contra.
El concejal de la formación conservadora Félix Romero ha utilizado su retórica habitual para justificar esta decisión, difícil de comprender y más aún después del escándalo de los últimos días.
Este nuevo reglamento recoge, por ejemplo, que los citados coordinadores y directores generales deberán cesar en sus cargos en el momento en que lo haga el equipo de gobierno que los contrato, justo lo que no han hecho los del PP, que han reclamado y han logrado recolocarse.
Debate
Aún así, según Félix Romero este reglamento supone que el tripartito "quiere colocar a todo lo que se mueve en PSOE, OSP, IU y ahora también en Podemos, y que no se note".
Desde el equipo de gobierno, Javier Porcuna ha dicho que la aprobación de estas modificaciones "supone el principio del fin de un sainete por parte de aquellos que nombraron a directores generales sin fundamento".
Tanto el responsable municipal como el concejal de Costa del Sol Sí Puede (CSSP), José Carlos Núñez, recordaron el acuerdo para que cuando se nombre a un director general que no sea funcionario suponga un cargo de confianza menos.
Núñez recordó que el PP tuvo 46 cargos de confianza en el anterior mandato y añadió que la aplicación de este reglamento "no costará un euro más" de los 27 nombramientos que hay actualmente y a los que definió como "amiguitos".
Porcuna concluyó recordando al PP los 12 cargos de confianza que recurrieron a la justicia tras finalizar sus contratos y ocho de los cuales han logrado ser readmitidos. "Lo de ahora tendrán momento de entrada y de salida", añadió.
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