"El problema del vecino será el nuestro". Con esta frase, Martín ha resumido lo que quiere que sea la Policía Local bajo su mandato, que ha dicho afronta con "ilusión y ganas" y en el que espera "no defraudar".
El nuevo responsable se ha mostrado agradecido por la confianza que han depositado en él y ha centrado su discurso en las tres líneas básicas sobre las que quiere centrarse y que ha definido como "objetivos para el próximo año".
Ha citado "recomponer la estructura interna" y también "retomar el pulso de la calle", aunque en el aspecto en el que más se ha detenido es en "girar" la Policía Local hacia la sociedad.
Este último aspecto quiere llevarlo a cabo en dos direcciones. "La primera, acercando el colectivo a las instuciones, tanto gubernamentales como no", porque ha querido recodar que el "80% del trabajo de la Policía Local es ayudar al ciudadano".
Y la segunda vertiente girará en torno a la integración en el tejido social. "No podemos vivir de espaldas a la sociedad que pretende proteger", ha dicho.
Para ello, ha hablado de la necesidad de impulsar la figura del "gestor policial personal", que estará en "contacto directo con el vecino y su realidad".
"Serán policía que escucharán, propondrán y explicarán cada acción realizada para solcionar la petición vecinal donde sea requerida", ha explicado, pidiendo también colaboración a la Policía Nacional.
Antes del acto, en declaraciones a los medios, Javier Martín mostraba su satisfacción por la gran afluencia. "La respuesta ha sido muy importante y no puedo más que muy satisfecho y contento, es un día para disfrutarlo", señaló.
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