Partido muy extraño el que se ha disputado este domingo en el Municipal, primero tras la destitución de Mehdi Nafti, y que ha supuesto un mal comienzo para el nuevo técnico, que ahora tiene una difícil papeleta por delante.
Carlos Julio fue expulsado en el minuto 34 al ver la segunda amarilla por una entrada muy aparatosa, innecesaria sabiendo que había visto una tarjeta solo diez minutos antes. El público se mostró crítico al ver a un equipo con poca garra ante un rival que se adueñó del balón.
Hubo un ambiente de pesimismo en las gradas y, para colmo, Kike Márquez se encaró con el palco tras marcar el empate. Mal panorama para el equipo, que aún así sigue en puesto de fase de ascenso pero tendrá que recomponerse.
El Granada B pudo conseguir un resultado muy abultado, pero lo cierto es que el Marbella tuvo también sus opciones e, incluso, entró en la recta final del partido con posibilidad de arañar al menos un punto.
Los blanquillos afrontaban el choque con la presión añadida de la victoria que había logrado por la mañana el Villanovense, que les cazaba en la tabla y los relegaba a la cuarta plaza por mejor diferencia de goles.
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Lolo González, en una jugada en el centro del campo. (Foto: J.Z.)
El técnico, como ya había avanzado durante la semana, no introdujo excesivos cambios, en concreto solo tres, con el regreso al equipo de Andrés Sánchez, Joseba Beitia y Nico Delmonte, este último tras sanción.
Salieron del once titular especto a Melilla Carlos Neva, que se quedó incluso fuera de la convocatoria, el capitán Añón y Damián Petcoff. Michele Diana era baja por acumulación de tarjetas.
El equipo se plantó en el campo con un dibujo que se puede definir como un 4-4-2. Por delante de la defensa actuaron Lolo y Joseba Beitia.
Kike Márquez abandonó su posición en la banda izquierda y actuó como media punta o casi como delantero, junto a Zé Turbo, con las bandas para Goti (derecha) y Luis Rioja (izquierda).
Y la primera ocasión llegó pronto, cuando apenas se habían sobrepasado los tres minutos, con un balón que recuperó Kike Márquez y lo filtró con maestría tras la defensa para Zé Turbo, cuyo disparo sacó Pol Ballesté en una gran parada.
Zé Turbo tuvo este mano a mano a los cuatro minutos de partido. (Foto: J.Z.)
Tras este escarceo inicial, el choque se tornó muy equilibrado, aunque el Granada acaparaba más la posesión, ante un Marbella sin presión y que en ataque tenía muy activo a Kike Márquez, prácticamente con un segundo punta.
El Granada B apareció en ataque en el minuto 13, con un centro desde la banda derecha de Antonio Marín que cabeceó Sergio Peña y atrapó bien el portero Bernabé.
Con el paso de los minutos, los granadinos se iban creciendo e inclinando el campo hacia la portería de Bernabé. Al Marbella FC le costaba mucho salir en ataque mientras el rival monopolizaba el balón hasta el punto de que se escucharon algunos silbidos desde la grada.
En el minuto 20, el visitante Aly Malle disparó desde dentro del área tras recuperar un balón en la banda pero el portero local atajó bien junto al primer palo.
Solo había un equipo sobre el campo y en el minuto 28 llegó otra ocasión para el Granada B con otro envío desde la derecha de Antonio Marín que remató mal Matheus.
El Marbella FC estaba muy arropado en defensa pero tenía muy poca intensidad en la presión, lo que permitía al filial mover el balón a su antojo. Desde la grada, la afición volvía a mostrar su disconformidad.
En ataque, los blanquillos solo tenían la inspiración de Kike Márquez, muy mal acompañado por Zé Turbo, que no tuvo su mejor día. En el estadio había un extraño ambiente, con una sensación de pesimismo que se iba adueñando también de los jugadores.
Y en el minuto 34, el choque se complicó aún más con la expulsión, al ver la segunda amarilla Carlos Julio por una dura entrada. El árbitro solo había mostrado dos tarjetas, ambas al lateral dominicano, que las vio en diez minutos.
La sensación era de auténtica zozobra del equipo, que solo tres minutos después encajaba el primer gol, obra de Tomás, cazando un balón por el centro de la defensa (min. 37).
Miguel Álvarez decidió mover el banquillo en ese momento y retiró a Luis Rioja para poner en el campo a un central más, Tiri, y que Marcos Ruiz jugase como lateral derecho. El equipo estaba roto y desde la grada tampoco se ayudaba porque crecían los pitos.
El Marbella tiró de orgullo y en un balón largo que ganó en velocidad Zé Turbo, regateó bien a Pol Ballesté y lo estrelló en el palo. Pudo ser el empate, que llegó cuando espiraba la primera parte.
Fue tras una falta lateral que sacó Andrés Sánchez, recogió Kike Márquez en el área y se revolvió para clavarla junto al poste.
El gaditano salió corriendo y se encaró con el palco, con gestos que se pueden entender iban dirigidos al responsable de la parcela deportiva, Raffaele Pandalone y su equipo, en desaprobación por la destitución de Mehdi Nafti.
Zé Turbo terminó estrellando este balón en el palo de la portería de Pol. (Foto: J.Z.)
Al descanso, el equipo había logrado minimizar los daños, aunque quedaba toda la segunda parte con uno menos, pero el Granada B había demostrado que era frágil en defensa y el Marbella FC podía tener sus opciones.
Tras el paso por el vestuario y relajar la tensión, tanto sobre el césped como en la grada, el segundo tiempo arrancó con una ocasión clarísima para el Granada B, con Tomás que la echó fuera a puerta vacía (min. 47).
El Marbella también lo intentaba y a balón parado estuvo a punto de marcar Nico Delmonte tras una falta lateral. El remate se marchó por muy poco (min. 52). Pero tres minutos después, Matheus cabeceaba al palo (min. 55).
El partido era una ruleta rusa para el Marbella, que tenía que intentar ganarlo pero se veía expuesto al gran peligro que generaba el filial granadino prácticamente en cada jugada.
En los locales, Álvarez retiró a un Zé Turbo desafortunadísimo y dio entrada a Okoye para aprovechar los espacios que dejaba el Granada B. Pero en ataque, el filial continuó insistiendo y el peligro era constante sobre la meta de Bernabé. Parecía solo cuestión de tiempo que llegase el segundo.
Pero el Marbella tampoco renunciaba a nada y tuvo dos ocasiones muy claras consecutivas. La primera, con un remate de Goti en el segundo palo, y justo después con otro de Okoye desde dentro del área, al que respondió Pol Ballesté con un paradón.
Pero al final, la balanza se decantó para el Granada B, que se puso por delante de nuevo con un cabezazo de Luis Suárez (min. 76). Este mismo jugador tuvo el tercero dos minutos después, pero su remate salió cruzado por muy poco.
Lo más positivo para el Marbella en los últimos minutos es que entró con posibilidades de conseguir un punto si marcaba. Añón tuvo dos disparo, uno que paró el portero y otro que rozó el poste, y también hubo otra Okoye, pero ya no fue posible pese a los intentos finales.
Ficha del partido:
Marbella FC: Bernabé, Carlos Julio, Andrés Sánchez, Nico Delmonte, Marcos Ruiz, Lolo González, Goti, Beitia (Añón, min. 74), Zé Turbo (Okoye, min. 58), Kike Márquez y Luis Rioja (Tiri, min. 38).
Granada B: Pol Ballesté, Antonio Marín, Hongla, Espiñán (Jean Carlos, min. 64), Pawel, Sulayman, Aly Malle (Santana, min 85), Navarrete, Matheus (Luis Suárez, min. 64), Sergio Peña y Tomás.
Árbitro: Fernández Fernández (extremeño). Amonestó al local Lolo y a los visitantes Matheus, Estupiñán. Expulsó por doble amarilla al local Carlos Julio (min. 34) y al visitante Luis Suárez (min. 91).
Goles: 0-1, min. 37: Tomás. 1-1, min. 45: Kike Márquez. 1-2, min. 76: Luis Suárez.
Campo: Estadio Muncipal de Marbella, con unos 1.000 espectadores en las gradas.
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