Uno de los sitios de moda en Marbella en los últimos veranos como es el chiringuito Playa Padre ha sido consumido esta tarde por las llamas en un aparatoso incendio que ha alertado a los vecinos del municipio.
Pasadas las 19:00 horas comenzaba el desgraciado suceso que, por fortuna, no ha provocado daños personales al encontrarse cerrado en esta época del año, ya que preveía abrir para Semana Santa.
Vecinos de la zona han sido los encargados de llamar al servicio de Emergencias 112 que, en apenas unos minutos, ha registrado hasta cinco llamadas alertando del fuego y de la gran columna de humo, según ha informado a este digital.
Efectivos de la Policía Local, cuya Jefatura está prácticamente al lado, y del Cuerpo de Bomberos se han desplazado hasta la zona para sofocar las llamas, algo que han conseguido en torno a las 20:30 horas, aunque el fuego ha devorado prácticamente por completo todo el establecimiento.
Aún se desconocen las causas que han originado el incendio, aunque podría haber sido intencionado. De momento la Policía no descarta ninguna hipótesis, aunque hay esperar a las investigaciones que se realicen.
La virulencia de las llamas, avivadas también por los materiales de los que estaba hecho el chiringuito, principalmente madera y paja, ha hecho que se hayan grabado muchos vídeos que circulan por 'WhatsApp' y las redes sociales.
Cuatro espacios
Playa Padre se había convertido en los últimos años en uno de los sitios de moda del verano local. Tenía, según se informó en su día, 700 metros cuadrados con cuatro espacios: barra, salón, comedor y zona de hamacas. Algunas informaciones situaron la inversión en un millón de euros.
El chiringuito se inauguró el
27 de mayo de 2017 con la presencia de la actriz Pamela Anderson, recordada por "Los vigilantes de la playa", en una gran fiesta en la que también estuvo la modelo y presentadora Charlotte de Carle.
El establecimiento estaba regentado por la actriz, empresaria y filántropa María Bravo, presidenta de la Fundación Global Gift, y su pareja, Nicolás Escánez.
Entre los socios se encontraba también Albert Beniflah, fundador del restaurante Mosh Fun Kitchen y exdirectivo de Olivia Valere.
En su día se vinculó también a la actriz norteamericana de origen hispano Eva Longoria, quien posteriormente tuvo que desmentir que estuviera implicada en el negocio.
Durante la construcción surgieron algunos problemas al delimitarse la zona con unas palmeras, que el Ayuntamiento pidió que se retiraran ya que la playa es un lugar público.