- Sara Baras brilló sobre el escenario de Starlite.
Sara Baras, una de las representantes más prestigiosas y reconocidas de las artes escénicas a nivel internacional, deslumbró anoche en Marbella con 'Suite flamenca', un espectáculo de hora y media de duración en exclusiva para Starlite, en el que la bailaora, directora y coreógrafa gaditana hizo una nueva lectura escénica de sus mejores momentos en el festival.
La polifacética artista ha actuado en los escenarios más icónicos del planeta y forma parte de la Familia Starlite, cuyo Auditorio ha frecuentado en numerosas ediciones y en la Gala Starlite.
De estas actuaciones surge su espectáculo especialmente diseñado como recuerdo de sus mejores momentos en el recinto del festival, un show muy emotivo que enmudeció al público de la cantera de Nagüeles de principio a fin.
Como comienzo de la actuación, la compañía al completo se puso una mascarilla de lunares durante la introducción, gesto ejemplar que levantó la primera gran ovación de la noche, aunque se sucedieron muchas: tras la guajira, la serrana y el martinete que seguían en el repertorio y que hicieron disfrutar al público con el poderío de Sara Baras y toda su banda de músicos y cuerpo de baile.
La genialidad de Sara Baras es indescriptible y se manifiesta de múltiples formas sobre el escenario: un giro precioso sin fin -que combinada con la falda del primer tramo del escenario se asemeja a los pétalos de una flor en un maravilloso movimiento-, la velocidad de vértigo de sus tacones y una sonrisa sincera que cautiva el corazón de sus espectadores.
Acompañando a Sara Baras estaba, entre otros, el cantaor toledano Israel Fernández o los músicos Diego Villegas, Keko Baldomero, David de Jacoba, Antón Suárez y Manuel Muñoz.
Una granaína, soleá por bulerías, cármenes, tangos, alegría y una bulería formaban parte del exclusivo repertorio elaborado para los espectadores de Starlite Catalana Occidente junto a una pieza con una gran carga poética denominada 'Mar'.
Llegando al final del show, Sara Baras se marcó un mano a mano con el saxofonista, en lo que fue un momento artístico de altura en el que el baile acompañaba a la música en una perfecta coreografía.
Antes del fin de fiesta, la bailaora dedicó al público unas cariñosas palabras: "Quiero decir que, con el corazón de todo este equipo y los que no se ven también, deseamos cositas buenas como nos dejó el maestro Paco de Lucía".
"Hay mucho dolor y hay que acordarse de esas personas que con esta historia están sufriendo y aquellas que se han ido, pero también hay que ser agradecido y tener esperanza", ha añadido.
En la última pieza, Sara lució una mascarilla blanca con lunares negros con la que bailó airosa. Su compañía al completo también lució una mascarilla, en este caso negra con lunares blancos, completando así un espectáculo repleto de magia y buenas vibraciones, perfecto para irse de Marbella con una sonrisa dibujada en la cara... tras las mascarillas.
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