El equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Marbella continúa abusando de la figura del pleno extraordinario, que cuesta un dinero añadido a las arcas municipales pero que repercute también en el bolsillo de la alcaldesa.
Este jueves 2 de diciembre se ha convocado uno, además con carácter urgente y dos puntos de Hacienda, solo
cuatro días hábiles tras la sesión ordinaria del pasado viernes.
Cuesta entender que los puntos que se van a tratar mañana no se pudieran abordar aquel día, o hacerlo en la sesión que tendrá lugar en unos días para tratar un tema tan importante como los presupuestos municipales.
La sensación es la de
improvisación constante por parte del equipo de gobierno, que funciona sin la más mínima previsión pese a que muchos de sus componentes llevan ya casi 13 años al frente del Ayuntamiento.
Además, cada pleno extraordinario (al igual que los ordinarios) supone 600 euros para algunos concejales de la oposición y para la alcaldesa, que es quien tiene la capacidad de convocarlos.
Como informamos recientemente, Muñoz ingresó el año pasado
14.800 euros por asistencia a plenos y comisiones informativas, dinero que añade a su sueldo como senadora.
En total, está en torno a los
100.000 euros al año por su actividad en la política.
A todo esto hay que añadir, como ya informamos, que el pasado viernes, tras el pleno ordinario, se celebró
otro extraordinario, del que no se ha informado públicamente.
Fue necesario ya que la alcaldesa se marchó a
hacerse una foto con el presidente de la Junta en el Hospital Costa del Sol y dejó al equipo de gobierno en minoría.
Marbella estuvo a punto de perder una
subvención de 2 millones de euros por ello. Al final, en la sesión extraordinario, salió adelante con el apoyo de la oposición.
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