Militantes socialistas de base piden primarias en el PSOE andaluz

Hoy publicamos la carta abierta de uno de esos militantes en Marbella, en la que hace una cerrada defensa de las primarias y rechaza los acuerdos en los despachos y que se generen peleas internas. 

Reclama unas elecciones internas "sin vetos a personas ni campañas sucias de derribo personal". 

"Las primarias vinieron para quedarse y para celebrase, aunque ahora les vengan mal a quienes las promovieron entonces", señala este militante de base. 


Renovación, renovación, ¡menos conmigo!

Leemos hoy a un grupo de ex dirigentes del PSOE pedirle a los jóvenes paso para ser ellos la renovación del partido. Al menos eso es lo que podemos concluir de un artículo que firman en un medio de comunicación donde piden que no se celebren primarias en el PSOE de Andalucía.

Lo primero que puede pensar cualquiera es que ahora no interesan las primarias. Hace menos de dos años sí. En aquel entonces, a golpe de twitter, día sí y día también, proclamaban aquello de “un militante un voto” o “las primarias han venido para quedarse”.

Esta vez son partidarios del acuerdo en petit comité, del acuerdo en despachos, porque la renovación de la que hablan es tan necesaria en Andalucía que sobra la decisión de los militantes. Eso sí, quieren ser ellos los renovadores.

Vienen a renovar los que han copado las instituciones durante décadas, algunos de ellos con retiros dorados dentro de esas mismas instituciones hasta cumplida la edad de jubilación. Ahora se presentan como renovadores.

Los que cuentan que estaban en política cuando Franco vivía, quieren renovar a los que nacieron cuando el franquismo ya no existía. Me sorprende las ansias de renovar de algunos que durante cuarenta años nunca se apartaron para que mi partido se renovara. Incluso algunos siguen hoy día en la ejecutiva del PSOE de Andalucía. Se ve que lo que reivindican no va con ellos.

Las peleas internas de sus tiempos acabaron por casi abrasar al PSOE en los años noventa, origen de muchos de los males que sufre el partido, sobre todo en las capitales de provincia de Andalucía.

Por poco no perdemos la Junta de Andalucía en el 94. Ahora vienen a renovar quienes estuvieron en mil y una pelea que nos ha ido desangrando década a década, alejándonos de la gente, convirtiendo las agrupaciones en campos de batalla de sus intereses.

No dejaron de ahondar en la división y no dejaron de airearla en los medios de comunicación. No soy partidario de tener un debate abierto a la ciudadanía pero, como militante de base que soy, me veo en la obligación de tener que responder, porque la responsabilidad no nos puede hacer enmudecer a quienes entendemos que el debate debe ser interno, en nuestras casas del pueblo.

La militancia socialista quiere votar en unas primarias en Andalucía, sin vetos a personas ni campañas sucias de derribo personal, como las que indecorosamente vemos a diario.

Las primarias vinieron para quedarse y para celebrase, aunque ahora les vengan mal a quienes las promovieron entonces. Cuestión de ética y de coherencia.

Juan Olcina Feliú
Abogado y militante del PSOE-A