Poco después de las 10:00 horas, con la presencia del pendón de la ciudad y de las autoridades locales frente a la puerta del Ayuntamiento, y tras sonar el himno nacional, ha comenzado este acto cívico-religioso, primero en el día grande de Marbella.
En ella se recuerda la toma de la ciudad por parte de los representantes de los Reyes Católicos a los musulmanes, sin derramiento de sangre, un 11 de junio de 1485.
La comitiva, que abría la Banda Municipal de Música y las reinas y damas de la Feria, se ha traslado hasta la iglesia de La Encarnación, donde se ha unido el párroco, José López Solórzano, y los miembros de la Hermandad de Romeros de San Bernabé.
Después, por las calles Caridad y Misericordia, se ha llegado hasta la plaza Altamirano, rumbo a Puente Málaga, para enfilar por la calle Málaga hacia la Cruz del Humilladero.
Allí han tenido lugar las ofrendas florales por parte de las reinas y damas de la Feria y también del alcalde, José Bernal. A continuación, se ha procedido, como cada año, a entregar las medallas de "Marbellero de Honor", que otorga la Asociación de Vecinos Huerto Porral.
El acto ante la Cruz del Humilladero, donde se produjo la entrega de las llaves de la ciudad. (Foto: J.C.A.)
La primera ha sido para la trabajadora de la Delegación de Fiestas, Carmen Pastore "Pichu", en el segundo reconocimiento que recibe en esta Semana Grande ya que la portada de la Feria de Día también lleva su nombre.
Le ha hecho entrega de la medalla el presidente de la asociación de vecinos, Cristóbal Mesa.
Y, la segunda, para una institución, la Funcación José Banús y Pilar Calvo, por su contribución al municipio. La ha recogido de manos del alcalde su presidente, Cándido Fernández Ledo.
La mañana ha sido muy soleada, ya con bastante calor desde estas horas iniciales. Desde allí, la comitiva ha retornado hasta la iglesia de la Encarnación, donde a las 12:00 horas ha comenzado la misa en honor del patrón.