El verano se va animando en Marbella. Cada vez hay más restaurantes abiertos, todavía con pocos clientes, y los chiringuitos de playa empiezan a funcionar poco a poco. A los hamaqueros también le cuesta todavía encontrar clientes.
El municipio entró el pasado lunes, al igual que el resto de la provincia de Málaga, en la fase 2 de la desescalada, en la que ya se permitía la estancia en las playas (hasta entonces solo el paseo) y el baño recreativo (antes solo deportivo).
Por el momento, sin movilidad más que dentro de la provincia, el disfrute el litoral queda principalmente para los vecinos, que ya desde el mismo lunes empezaron a acudir.
Había ganas de tomar el sol y de darse un baño, más aún con la llegada del fin de semana, aunque el viento ha molestado.
En zonas como la
playa de la Fontanilla, el oleaje de los últimos días se ha vuelto a llevar gran parte de la arena.
La playa de la Fontanilla de Marbella, este domingo por la mañana. (Foto: J.C.A.)
La normalidad ha sido la nota predominante y, por ahora,
no se han producido aglomeraciones. Los bañistas respetan la distancia de seguridad.
El Ayuntamiento de Marbella no ha puesto en marcha aún ninguna normativa, salvo algunas recomendaciones en redes sociales. Apenas hay cartelería.
La temporada alta de baño comenzará a partir del próximo
15 de junio. Para entonces ya habrá movilidad entre las provincias de Andalucía, con el pase este próximo lunes a la fase 3.
Habrá que esperar hasta el
22 de junio, cuando termine el estado de alarma, que será el momento en el que se permitan desplazamientos desde cualquier punto de España.
En Marbella se ha anunciado una aplicación para móviles que informará en tiempo real sobre el aforo de cada playa, que además controlarán los vigilantes que está contratando la Junta de Andalucía.
Un espetero en los chiringuitos de la Fontanilla, este domingo. (Foto: J.C.A.)
La pandemia sigue controlada en el municipio, donde solo se contabilizan ya cuatro casos de coronavirus diagnosticados por PCR en las dos últimas semanas.
Habrá que ver qué incidencia tiene el aumento de la movilidad y la llegada de turistas, tanto del resto de España como, a partir del 1 de julio, del extranjero.