El andamiaje se sujeta con tres torres, dos laterales y otra situada sobre la mediana de la calzada. Se mantiene la red protectora que se había colocado en febrero y también las plataformas se han recubierto con una tela para que nada caiga sobre la calzada.
Los vehículos pueden circular con normalidad, después de que durante la pasada semana se tuviera que cortar el tráfico mientras se construía la estructura bajo el arco y la torre central. No fue necesario para las dos laterales.
Durante los dos meses que, según se ha anunciado, durarán los trabajos, no habrá problemas con la circulación, mientras se realizan las repaciones previstas, aunque sí habrá que volver a cortar la avenida para desmontar los andamios una vez se finalice.
Las obras incluyen la retirada de las placas deterioradas, el refuerzo de la estructura primaria, la instalación de una estructura metálica secundaria, la colocación de nuevas placas y el sellado de todas las placas, tanto las antiguas como las nuevas.
Esta actuación se lleva a cabo después de que los desprendimientos en el arco se iniciaran el 2 de octubre de 2013, y se repitieran el 6 de febrero de 2014. Como consecuencia, el Ayuntamiento encargó un estudio para realizar un diagnóstico y ver la solución más viable.
Surgió entonces la posibilidad de desmantelar el arco, como se hizo con el de San Pedro Alcántara, o rehabilitarlo. La primera medida fue situar unas redes protectoras, que se colocaron a finales de febrero de este año.
En julio, se informó de que se había tomado la decisión de estabilizar el arco, como "solución a corto" plazo, arreglando su esqueleto y también las placas que lo recubren, trabajos que ahora comienzan.