Opium, que ya funcionó el pasado verano en horario reducido,
no podrá abrir este año ya que el Ayuntamiento de Marbella le ha revocado la licencia.
En 2022, este club de playa se situó en el centro de la polémica, con una
denuncia de los vecinos ante los juzgados por
las molestias de la música y
un tiroteo que dio la vuelta a España.
Entonces, el Consistorio terminó
revocando la licencia de apertura
en noviembre de ese mismo año.
Pero la empresa, en marzo de 2023, como avanzó
Marbella24horas, inició los trámites para conseguir nuevas autorizaciones.
El 22 de agosto de 2023, la Junta de Gobierno Local acordó conceder la
calificación ambiental y la licencia de instalación.
Fueron los pasos previos a la
licencia de apertura, que se otorgó finalmente el
19 de julio de 2024.
Opium abrió sin ese permiso el
9 de julio, pero finalmente decidió cerrar al día siguiente hasta que le llegó la autorización.
Se le otorgó para "establecimiento de hostelería sin música, terraza privativa y piscina".
El verano pasado funcionaron solo de día, cerrando en torno a las 20:00 horas cada jornada.
Los vecinos llevaron estos nuevos permisos a los tribunales por la vía
contencioso-administrativa y, finalmente, el Ayuntamiento ha decidido revocarlos.
En una resolución de 8 de enero de 2025, a la que ha tenido acceso
Marbella24horas, el Director General de Proyectos e Infraestructuras, Ignacio Díaz Rodríguez-Valdés, acordó dejar sin efecto la licencia de apertura.
El argumento que utiliza es que, como ya se sabía, había finalizado la autorización que concedió en diciembre de 2020 la
Demarcación de Carreteras por un periodo de cuatro.
Aquel permiso se había otorgado para un "club deportivo", algo bastante alejado del uso real que había tenido el establecimiento.
Desmontaje
Ahora, además, el Ayuntamiento ordena el "cese y desmontaje" de las obras que se hicieron conforme a aquel proyecto.
"Debiendo cesar y
eliminarse las instalaciones y usos provisionales amparados en la referida licencia de apertura provisional sin derecho a indemnización alguna", señala el director general.
De esta forma, Opium vuelve a quedarse sin licencia de apertura y también tendrá que desmontar el club de playa.
Los vecinos, además, mantienen abierta una causa penal en los juzgados de Marbella.
La discoteca Opium fue uno de los patrocinadores del coche de carreras del piloto
Cristian Broberg Muñoz, hijo de la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz.
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