Las obras del bulevar siguen avanzando y se ha concluido la fase de hormigonado del tablero de la gran pasarela elevada que cruzará la zona de este a oeste, uniéndola por encima de la rotonda.
Ahora falta por terminar la barandilla y colocar la pavimentación de madera para ir dando los últimos retoques. La alcaldesa visitó el bulevar el pasado mes de agosto y aseguró que el Ayuntamiento tenía previsto recibir la obra a finales de septiembre o en la primera semana de octubre, algo que no va a ocurrir.
La estructura de la pasarela, ha llamado la atención de muchos vecinos, algunos de los cuales se han dirigido a este digital para denunciar que resulta peligrosa en la parte de la barandilla, ya que por los laterales podría caerse un niño.
Lógicamente la instalación aún no está finalizada y habrá que esperar a que lo haga para ver si este peligro es real. Tal y como está ahora es evidente que sí existe riesgo, como se puede apreciar en la fotografía.
Parte de la barandilla que resultaría peligrosa, aunque todavía está sin acabar. (Foto: J.Z.)
El bulevar tiene una superficie de 55.000 metros cuadrados, de los que 11.000 estarán ocupados por zonas verdes, con césped, unos 500 árboles y 32.000 ejemplares de plantas, la mayor parte aromáticas.
Contará con siete zonas de agua de entre 3.500 y 4.000 metros cuadrados de extensión que darán un carácter diferente al recinto y más de 1.000 puntos de luz, algunos de los cuales se han probado para comprobar su efecto.
Imagen tomada desde la parte superior por Juan Antonio Fernández y difundida en Facebook.