Como en 2014, la celebración se ha adelantado al día antes y, también al igual que el año pasado, el cielo se ha abierto y ha lucido el sol para dar brillantez a esta tradicional festividad.
Con la presencia de las reinas y damas de la feria del barrio Pilar-Miraflores, así como de las autoridades locales, encabezadas por el nuevo alcalde, José Bernal, junto a los directivos de la asociación de vecinos y la banda de La Pollinica, el desfile ha arrancado a las cinco de la tarde.
Desde la capilla situada en la calle Reino de Aragón se ha bajado hacia la iglesia de La Encarnación, donde a las 19:00 horas ha tenido lugar la misa, para volver después al punto de partida.
La fiesta, como el año pasado, se ha separado de los actos de la Guardia Civil, que tendrá lugar este lunes 12 de octubre, aunque la procesión sí ha vuelto a estar acompañada por miembros de la Benemérita.
La salida de la procesión en la ermita de la calle Reino de Aragón.
En las calles no ha habido demasiado público, algo que viene siendo habitual en una festividad a la que le cuesta sacar la gente a la calle pese a que la tarde ha sido espléndida tras la lluvia de por la mañana.
En el comienzo del recorrido, el alcalde, José Bernal, ha entregado el bastón de mando de la ciudad a la Virgen, que lo ha llevado en el trono durante la procesión.
Para este lunes, jornada de la Hispanidad, fiesta nacional, quedan los actos de la Guardia Civil con el recuerdo a los caídos en el cuartel de Leganitos y la misa en La Encarnación.
También concluirán las fiesta del Pilar-Miraflores con distintos actos, entre ellos una paella popular.