En su opinión, se trata de un equipamiento deportivo en un terreno público que objeto de "numerosos tejemanejes" por parte del urbanismo que impuso el GIL y al que ahora el PP, "en lugar de recuperar el patrimonio público municipal", todo apunta a que va a acabar entregando en manos de un "negocio privado".
Monterroso considera que "el futuro equipamiento en la parcela del Francisco Norte que, según información pública, contará con cuatro pistas de pádel, una polideportiva y una pista de patinaje, más un gimnasio, se ha diseñado sin contar con la ciudadanía, sin consultar qué tipo de equipamientos deportivos eran los más demandados o cual debería ser la fórmula de gestión"
Sostiene que el PP sigue "decidiendo todo en solitario, la alcaldesa no ha aprendido del varapalo de los rascacielos y deja a la ciudadanía al margen de la toma de decisiones para dar rienda suelta a un urbanismo opaco y en favor de intereses particulares".
Según Díaz, "la decisión de que las pistas sean gestionadas directamente por la empresa que promueve la nueva instalación el PP está tomada desde hace tiempo, por ello la alcaldesa rechazó la propuesta elevada por IU al Pleno solicitando la gestión pública directa por parte del Ayuntamiento del futuro equipamiento deportivo".
El anuncio de que se deberán aplicar precios públicos "no sirve para justificar" lo que en la práctica supondría que la empresa acabaría amortizando el costo de ejecución de esta obra mediante las sumas que cobre a los vecinos que hagan uso de las instalaciones, por lo que "finalmente serían los vecinos de Marbella los que pagarían la obra del Francisco Norte, tanto el aparcamiento subterráneo, como las instalaciones deportivas y el arreglo de las calles anexas".
Para IU, "Muñoz pretende continuar una acción iniciada en época del gilismo y entregar a un negocio privado un terreno público que fue cedido al municipio de Marbella para albergar un equipamiento deportivo público", por lo que sostienen que, de acabar en la gestión privada, al final "el GIL y el PP perpetrarían el robo de un espacio urbano para que acabe por acoger dos negocios privados: un aparcamiento y un complejo deportivo de gestión privada".
La formación de izquierdas hace un llamamiento para que "tras 70 años de historia como equipamiento público y después de innumerables acuerdos nulos y corruptelas del gilismo, finalmente el PP no acabe por privatizar la propiedad del aparcamiento del subsuelo y la gestión privada del equipamiento deportivo en su superficie, una gestión privada de este rincón de la ciudad respondería a los intereses económicos de la mercantil y no a los de la ciudad. Al final los Jesús GIL, Julián Muñoz, Roca o Ávilas Rojas con la acción del PP se saldrían con la suya".
Desde el Equipo de Gobierno, su portavoz, Félix Romero, ha lamentado “las sombras sin fundamento” que pretende verter Izquierda Unida en relación al proyecto y ha recordado que la parcela de 10.000 metros cuadrados “es de titularidad pública gracias a la gestión directa de la alcaldesa”.
“Esta gestión ha permitido recuperar una parcela en pleno centro de la ciudad”, ha afirmado Romero, quien ha resaltado también la medida de “vincular las licencias de apertura y de obras del aparcamiento a la realización de una serie de actuaciones sin coste para el Ayuntamiento con el objetivo de devolver esa parcela a la ciudad como equipamiento deportivo”.