En la recta final del actual curso escolar, se empieza ya a planificar el próximo y surgen los problemas en el punto más conflictivo del municipio, los barracones situados en la zona de Xarblanca, en Marbella.
La Asociación de Madres y Padres (AMPA)
Los Molineros, que representa a las familias de los 209 alumnos del
SESO Dunas de las Chapas, ha manifestado a través de un comunicado su descontento.
Hablan del "profundo malestar por el trato que están recibiendo nuestros hijos e hijas por parte de las instituciones públicas en la organización del
curso 2022-2023".
Señalan principalmente a la
Junta de Andalucía, responsable en materia de educación, pero también el
Ayuntamiento de Marbella, que debe acondicionar una parcela.
La AMPA ha definido como "desalentadora" la noticia que se les dio en el Consejo Escolar del pasado 3 de mayo sobre que, para el próximo curso, "se ha planteado
reducir una línea en 4º de la ESO y mantener dos líneas en 1º de la ESO".
Consideran que esta reducción implicará "tener
más de 30 alumnos por clase" en unas aulas prefabricadas "de tamaño más pequeño de las que hay en cualquier centro educativo".
Critican que se pretenda instalar "un único módulo" con
dos aulas en los terrenos anexos a los actuales barracones.
Según explican, esta circunstancia hace que tan solo se tenga una único
aula de desdoble para realizar todas las asignaturas optativas, con el agravante de que si se superara la ratio en alguno de los cursos, se dejaría de tener aulas de desdoble.
"¿Os imagináis dar
clase de religión y valores en una misma aula, con dos profesores y la mitad de alumnos mirando hacia un lado del aula y la otra mitad de alumnos mirando hacia el otro lado?", se preguntan.
También muestran su "preocupación" por la adecuación de los
terrenos anexos al centro educativo, en los que se deben instalar los módulos.
"Hasta la fecha no se han hecho ninguna actuación y, tanto la
Consejería de Educación, como el
Ayuntamiento de Marbella tienen que ponerse las pilas", señalan.
Piden que no se rememoren las "malas experiencias" de cursos pasados por la
tardanza en ejecutar las obras y se preguntan también si volverá a comenzar el curso "con retraso y con aulas con deficiencias".
La conclusión final es que exigen que
se instalen dos módulos con cuatro aulas prefabricadas para que pueda existir un "mínimo espacio disponible" y que se acondicione la parcela anexa para ubicarlos.
Por último, en su comunicado recuerdan las "carencias educativas" de los alumnos de este centro educativo provisional, que no tienen gimnasio, ni aula de informática, ni biblioteca, entre otros problemas.
Las
obras del nuevo instituto, que se está construyendo en Las Chapas, junto al hospital, comenzaron el pasado mes de febrero y el compromiso de la Junta es que está listo para septiembre de 2023, algo que parece difícil.