El XII Congreso de Trabajo Social arranca en Marbella con 1.200 personas y críticas a los recortes

En un ambiente muy crítico hacia las políticas del Gobierno se ha puesto en marcha este congreso, que se desarrollará en Marbella hasta este sábado, y que está organizado por el Consejo General de Trabajo Social, con el apoyo de distintas administraciones públicas.

Durante el acto de inauguración, que ha tenido lugar este jueves por la tarde, se han escuchado abucheos y algunos gritos de "golfos" hacia los políticos del PP presentes, principalmente hacia el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, el malagueño Juan Manuel Moreno Bonilla, representante del Gobierno en el acto, al que el auditorio pidió a coro "¡derechos sociales para todos y todas!". 

También fue silbada e interrumplida con gritos la vicepresidenta de la Diputación, Ana Mata, cuando defendió la reforma de la administración local y señaló que "tiene que servir para garantizar la prestación de los servicios sociales". 

Además, intervinieron en la inauguración la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, María José Sánchez, la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, la presidenta de la Conferencia de Directores de Trabajo Social, Yolanda Domenech, la presidenta del Consejo Andaluz de Trabajo Social, Encarnación Peláez, el presidente del Consejo de Málaga, Rafael Redondo, y Ana Lima, presidenta del Consejo General de Trabajo Social. 

El secretario de Estado destacó la importancia de este congreso por el análisis que hacen los profesionales, cuyas conclusiones tras estos tres días pidió que le hicieran llegar para estudiarlas e incorporarlas a la acción del Gobierno. 

"Debemos pensar en el futuro, me preocupa el perfil del país dentro de 20 ó 24 años", señaló, y añadió que en el año 2049 se prevé que por cada diez personas que trabajen en España habrá nueve inactivas. "Por cada pensionista tendremos 1,3 personas en edad de trabajar", añadió. Estas reflexiones llevan, según dijo, a que en el horizonte aparezcan "nuevas necesidades sociales". 

El representante del Gobierno dijo que a finales de diciembre estará terminado el Plan de Inclusión Social 2013-2016 y también señaló que ya están cerradas las subvenciones sociales a través de la casilla del IRPF, que este año ascienden a 210 millones de euros, seis más que el anterior. 

La consejera de la Junta, María José Sánchez, dijo que "estamos en tiempo de malestares, pero también de esperanzas" y sostuvo que los temas sociales se deben tratar con "mirada larga a la vez que se va a resolviendo lo cotidiano". 

Consideró importante que "quede claro que existe un sistema público de servicios sociales y que no queremos que se diluya", para lo cual pidió un marco legislativo con carácter estatal, algo que ahora no existe. 

También abogó por incluir en la Constitución que las políticas sociales aparezcan como "un derecho fundamental" para que cuando haya una situación de dificultad y de ajustes "exista también un sistema de garantías". 

La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, destacó que para el Ayuntamiento las políticas sociales son una "prioridad" y subrayó el esfuerzo que se está haciendo en esta materia. 

La directora del congreso y presidenta del Consejo General de Trabajo Social, Ana Lima, expresó su solidaridad con los profesionales que no han podido acudir a esta cita por haber tenido que emigrar a otros países o por estar en paro. 

Recordó que gracias a la Constitución de 1978 se pasó de la beneficencia a un sistema público de servicios sociales y dijo que ahora es necesario "defender lo que tanto nos costó construir". 

"Los estados deben recuperar la democracia y regular a los mercados", señaló, y concluyó diciendo que "los trabajadores sociales no podemos mantenernos impasibles ante los recortes ni ante el sufrimiento de las personas y la degradación de las políticas sociales". 

Tras este acto inaugural, comenzó el congreso con la primera ponencia marco de Donatella Della Porta, del Instituto Italiano di Science Umane y del European University Institute (Italia), titulada “Neoliberalismo amoral y protestas morales: movimientos sociales en tiempos de crisis”.

Este congreso estatal se celebra cada cuatro años y la última edición tuvo lugar en Zaragoza. En esta ocasión asisten más de 1.200 personas llegadas desde todos los puntos de España.