El 30 de diciembre del año pasado se celebró el pleno extraordinario en el que se aprobaron definitivamente los presupuestos municipales para 2021.
Se llegó por muy poco al objetivo marcado de que entraran en vigor el 1 de enero, motivo por el que el equipo no quiere tener que repetir esa circunstancia.
El concejal de Hacienda,
Félix Romero, ha señalado que su intención es que en las próximas semanas se lleven las cuentas para 2022 a la Junta de Gobierno Local.
Después, pretende que "la aprobación inicial se haga
en octubre" y se marca como objetivo "conseguir la aprobación definitiva antes de que acabe
noviembre".
Previsiones, sin duda, muy optimistas y difíciles de cumplir, algo que habrá que ver en los próximos meses.
"Así llegaríamos a la utopía que siempre hemos querido de estar en diciembre únicamente con
el cierre del ejercicio y el pago de facturas", ha añadido.
Los de 2022 serán los primeros presupuestos que tengan que recoger el
plan de ajuste obligado por la necesidad de pedir un préstamo de 44 millones de euros al Fondo de Ordenación Estatal para pagar sentencias judiciales.
Romero sostiene que esos recortes no tendrán demasiada incidencia. "El encaje será similar al del año pasado, en inversión, personal y servicios", ha dicho.
Únicamente, destaca que habrá "una pequeña reducción en el
gasto corriente". En ese capítulo habrá que recortar un 4% según el plan de ajuste.
En relación al resultado del presente ejercicio, ha reconocido que "
no habrá superávit, pero será mejor que el anterior".
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