La peregrinación hasta la
aldea almonteña por parte de la hermandad de Marbella ha tenido lugar esta mañana, un acto ya tradicional que arranca temprano.
Este año, como tampoco se hizo en el anterior, no ha habido lanzamiento de cohetes, aspecto que siempre generaba polémica.
A las 8:30 horas ha tenido lugar la tradicional
misa de romeros en la iglesia de La Encarnación.
Desde allí, a la conclusión, se ha iniciado un recorrido hasta la plaza de Los Naranjos, donde a la puerta de la Casa Consistorial se ha realizado la ofrenda floral como es habitual.
La carreta con el Simpecado, tirada por bueyes, con su sonido de cascabeles, ha hecho su habitual
trayecto simbólico por el Casco Antiguo.
Tras pasar por el Ayuntamiento, ha continuado por las calles Estación, plaza de la Victoria, Pedraza, Ramón y Cajal, Miguel Cano, Duque de Ahumada y Antonio Montero Sánchez.
Al final del recorrido, se ha cargado
el Simpecado para iniciar el camino hacia los Pinares de Aznalcázar.
A
Villamanrique de la Condesa se llegará las 12:15 horas de este miércoles día 4 tras realizar el paso por el
Vado del Quema, que está previsto a las 10:15 horas.
La presentación de la Hermandad de Marbella ante la
Puerta Mayor del Santuario tendrá lugar el sábado 7 en torno a las 21:00 horas.
El domingo 8, festividad de
Pentecostés, tendrá lugar la Solemne Misa Pontifical, a las 10,00 horas, que como novedad, se traslada al Paseo Marismeño, frente al Santuario de El Rocío.
En la madrugada del lunes tendrá lugar como es habitual
el salto de la reja y después la procesión de la Blanca Paloma. Concluida la celebración, se emprenderá el viaje de vuelta.