Poco apoyo el que continúa prestando el PP a Marbella tras anularse el PGOU de 2010 pese a que ofrecieron su colaboración. Las críticas son constantes y siguen utilizando este asunto para intentar sacar rentabilidad electoral.
El último ha sido esta mañana el presidente provincial, Elías Bendodo, que ha intervenido en un desayuno informativo de Fórum Nueva Economía, en el que ha dado una nueva vuelta de tuerca y ahora considera que la solución ya no es buscar una normativa transitoria sino directamente un nuevo ordenamiento urbanístico.
"El Ayuntamiento de Marbella no tiene un solo día que perder para elaborar un nuevo PGOU", ha dicho, en lo que considera como la única solución posible.
"No se trata de hacer campañas de publicidad, sino de asumir responsabilidades y ponerse a trabajar y mirarse menos el ombligo", ha indicado, ofreciendo el apyo de la Diputación para "meter el hombro".
En sus declaraciones, además de meter presión al Consistorio, no ha dudado en lanzar andanadas hacia la Junta y ha hablado de la "maraña normativa" existente en la comunidad y que ha resultado "tremendamente perjudicial" para la Costa del Sol.
Bendodo considera que existe un "triángulo perverso con el que Andalucía espanta las inversiones foráneas" y ha citado la "excesiva presión fiscal, la dispersidad burocrática y la inseguridad jurídica", en un panoma apocalíptico.
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