El Marbella FC se convertirá en SAD antes de que termine la temporada

Con esta decisión, el club da un paso decisivo hacia su estabilidad y deben quedar en el olvido los problemas que ha sufrido desde 2006 y que han amenazado su existencia durante estos años.

Esta tarde, los socios de la entidad han dado el visto bueno a la transformación en sociedad anónima deportiva, un proceso que se inicia de manera voluntaria y que, como es conocido, solo es obligatorio cuando un club asciende a Segunda División. Si eso ocurriera, el Marbella FC ya estaría preparado. 

Antes de la asamblea de esta tarde, ha sido necesario realizar una auditoría para conocer el estado exacto de la cuentas del club y tomar la decisión en junta directiva, previa a esta ratificación de los socios. 

El capital social mínimo será de 590.000 euros, una cantidad que surge de aproximadamente el doble del pasivo que se ha detectado en las cuentas, que es de 290.000 euros. 

La entidad calcula que en aproximadamente dos meses estará finalizado la transformación, en todo caso siempre antes de que termine la temporada. 

Aún no se ha informado de las fechas en las que se abrirá la compra de acciones. El proceso se iniciará con una primera fase a la que solo tienen acceso los socios del club. Habrá que ver si ahí se cubre todo el capital social, que lo normal es que se suscriba en su parte mayoritaria por el presidente, Alexander Grinberg. 

Si quedase alguna cantidad por cubrir, se abrirían otras fases, la última de ellas con disponibilidad para cualquier ciudadano. 

Todo el proceso está regulado por el Consejo Superior de Deportes y por la llamada Comisión Mixta, que son los que deben dar el visto bueno definitivo. 

A la asamblea de esta tarde han asistido cerca de 30 personas. Han estado los socios rusos, con Grinberg a la cabeza, y también los de Marbella, como el anterior presidente, Antonio Pérez Ramos, junto a Antonio Rivera, Miguel Sánchez, Santiago López y Juan Torres. 

Además, han participado representantes de los futbolistas, José Trujillo y Manolo Reina, y del cuerpo técnico, Alejandro Ávila y Pablo Alfaro, así como dos abonados. 

Hay que recordar que es la segunda vez que el Marbella inicia un proceso de conversión en sociedad anónima deportiva. El anterior, obviamente no llegó a buen puerto e, incluso, estuvo a punto de haber otro, ya que también estaba entre los planes de Rafael González Cobos. 

La primera vez que se intentó fue a finales de 2006 y se esperaba que el capital lo cubriera el entonces mecenas de la entidad, el empresario salmantino Juan José Pascual. Finalmente, abandonó el club marbellí para centrarse en la Unión Deportiva Salamanca. 

Con el paso que ahora se ha dado, y que esta vez sí concluirá, se garantiza la estabilidad del club, que adquirirá una estructura empresarial. Ya no será posible que un presidente se marche y lo deje en la estacada, sino que ahora, si el dueño quiere abandonar el barco, debería vender las acciones y buscar otro propietario.

No es ningún secreto que el objetivo de Alexander Grinberg es meter al club en Segunda División y, si esto se produjera, ya tendría andado el camino de la conversión en SAD.