Álex Gómez, de la escuela a la portería de la UD San Pedro

La lesión de Javi Muñoz, la baja de última hora de Adam y la confianza que tienen en la UD San Pedro en este portero juvenil, le abrieron las puertas a Alejandro Gómez "Álex" para formar parte de la expedición que debía viajar a Linares para medirse al sólido líder del Grupo IX de Tercera División.

El juvenil de solo 16 años no se achantó y disputó un extraordinario partido en su debut en la categoría. "Estaba más bien nervioso, pero cuando llegué al calentamiento y ya entrando al partido se me quitó todo. Pensé que iba a ponerme más nervioso", sostiene en declaraciones a este digital.

Álex se enteró el sábado por la tarde de que iba a jugar y le ilusionó "poder debutar en un campo tan importante, al que van tanta afición, me parecía muy bonito", añade. El joven guardameta ha reconocido que "fue inolvidable y es un recuerdo que se me va a quedar para siempre".

Y es que, el portero juvenil  tuvo una destacada actuación con intervenciones de mucho mérito que permitieron que su equipo lograse los tres puntos en un campo donde no había ganado ningún equipo desde 2013.

Álex se muestra como un jugador maduro y muy tranquilo. "El trabajo estaba hecho en los entrenamientos y sabía lo que había que hacer", ha apuntado, al tiempo que ha destacado el ambiente de una grada que le intentó meter presión: "hubo alguna cosilla con la afición, pero es lo que tiene el fútbol y si quieres llegar a profesional es lo que te vas a encontrar en cada campo".

Para el joven sampedreño una de las figuras más importantes el día de su estreno fue el apoyo que recibió de su compañero, Javi Muñoz, y del entrenador de porteros. "Me dijeron que estuviese tranquilo, que lo iba a hacer bien". No le dijo nada el míster "y me pareció bien, así tenía un poco menos de presión, se lo dejó decir al entrenador de porteros", explica.

"Esperaba que el partido fuera así, disfruté muchísimo, como un niño", ha resaltado Álex, quien se quita méritos y ensalza a sus compañeros: "las paradas son importantes pero también que el equipo metió goles, defendimos muy bien y me lo pusieron muy fácil".

Su actuación fue brillante, con grandes intervenciones, solo le faltó haber parado el penalti. "Lo primero que pensé tras pitarlo era en intentar pararlo, le aguanté todo lo que pude pero al final me engañó. Si llego a parar el penalti ya habría sido el partido perfecto".

Tras acabar el choque corrió a celebrarlos con sus compañeros y uno de los primeros con el que se fundió en un abrazo fue con el lateral Rafa, "pero me habría abrazado a cualquiera", reconocía sonriente. Y es que todo el equipo le "apoyó muchísimo en todo momento". Incluso ha apuntado que "Bezares me mandó un mensaje la noche antes del partido y me tranquilizó más".

El joven portero rojinegro lleva jugando en las categorías inferiores del San Pedro desde alevín y ha ido subiendo todos los peldaños hasta llegar al equipo de Tercera División con el que entrena desde la pretemporada, lo que sin duda ha hecho más fácil para él entrar en el equipo. Hace poco estuvo probando con el Betis.

Explica que entrenar con el primer equipo sampedreño le viene "muy bien" para adaptarse a una categoría en la que "juega gente mayor que yo". Y es que el domingo se juntaron en Linarejos pasado, presente y futuro de la categoría con Chico Linares, que con 42 años es el jugador más veterano de la Tercera, y Álex, que con 16 es uno de los más jóvenes.

"Yo estoy preparado para seguir jugando los partidos que el míster requiera", ha afirmado un optimista Álex, que ha concluido con un deseo como es "poder debutar en mi casa y ante la afición de mi pueblo, eso sería lo más bonito".