Sobre la peatonalización

24/10/2012

Ya he podido conocer, de primera mano, no el proyecto pero si al menos el primer esbozo de idea sobre la peatonalización de dos amplios tramos de las avenidas Ricardo Soriano y Ramón y Cajal, es decir, desde el Edificio Portillo (calle Calvario) hasta el edificio Parquesol (calle Félix Rodríguez de la Fuente). Aunque parece que la cuestión se ha callado un poco en el debate ciudadano, teniendo en cuenta que entramos en los meses de espera a conocer oficial y técnicamente si es posible o no.

Todo pese a que el momento actual de la idea es que debe pasar por un informe de viabilidad de una determinada empresa (se supone, de prestigio), que determinará si la idea es posible llevarla a cabo o sólo se queda en un sueño.

Como desde un principio he pensado (una vez que pudiese conocer la cuestión más importante, a mi entender, del proyecto), podría habar con cierto conocimiento de causa. Y salvo que la empresa destinada a informar de la viabilidad diga (y sobre todo, acredite) lo contrario, me parece que las alternativas al tráfico que diariamente absorbe la principal vía de la ciudad no son de ningún modo suficientes. Pero el asunto es de tal calado que merece la cuestión ser analizada detalladamente:

1) La idea de la peatonalización no es negativa, sino lo contrario, pienso que el centro de Marbella, que se muere por momentos (y por desgracia) necesita de un revulsivo que le haga poder acoger a ciudadanos, eventos, negocios, actividad diaria, etc. Nadie creo que esté en contra de proceder con un cambio o una remodelación integral de la principal avenida de la ciudad, en la misma línea que las grandes ciudades han realizado en los últimos años, pero las cosas hay que hacerlas pensando en los ciudadanos, y sobre todo, como se lo hice saber al político que me informó, contando con los vecinos (no de la zona, sino de la ciudad), y los vecinos considerados individualmente, no a través de las asociaciones o federaciones, de las cuales tengo mi clara opinión.

2) Por un lado, en el eje Este-Oeste, es decir, viniendo desde Málaga, la alternativa parece ser que se efectuará a través del túnel bajo la Avenida del Mar y la calle Antonio Belón. Insuficiente a todas luces, máxime cuando el paso subterráneo mantiene operativo únicamente un carril puesto que el otro se utiliza como segundo acceso al aparcamiento. Según me dicen, se estudia un nuevo acceso al más céntrico de los parking, cuestión que se presenta cuanto menos, difícil, para poder usar los dos carriles, aunque el mencionado túnel tiene un lamentable aspecto. Y la calle Antonio Belón (actualmente en pleno proceso de remodelación) es básicamente insuficiente para poder aglutinar los miles de vehículos que transitan actualmente por Ricardo Soriano así como Ramón y Cajal. Aunque el vial que finalmente quede en Antonio Belón tendrá casi 3 metros de anchura, no puede recibir una densidad excesivamente alta de tráfico. Y aunque la mencionada calle está ensanchando las aceras para la mejora del tránsito peatonal, es muy difícil que pueda acoger tráfico.

3) Por otro lado, en el adverso, es decir el eje Oeste-Este, viniendo desde Estepona, el desvío del tráfico se efectuaría por la calle Calvario, tras la construcción de una rotonda, y los vehículos utilizarían la ya por si densa Jacinto Benavente y Avenida del Mercado para después poder bajar por el Arroyo de la Represa (con vías más que estrechas). Por tanto, demasiadas vueltas y calles muy difíciles para alta circulación.

4) Quedaría a salvo un vial de acceso a los (eso sí), pocos aparcamientos existentes en ese tramo viario. Sólo existen dos edificios con estacionamiento privado bajo tierra, concretamente Marqués de Salamanca y Edificio Zea. No más… Propugno por utilizar el sistema usado en Málaga capital, en el que una tarjeta permite a residentes y servicios públicos, tras ocultarse automáticamente las pilonas, acceder al centro histórico al objeto de subida y bajada de personas con movilidad reducida, etc.

5) Los autobuses (y sobre todo los camiones) no pararían en el tramo a remodelar. Cuestión lógica. Habrá que otorgarse clara e inequívoca información sobre las nuevas paradas, itinerarios, etc.

6) Es importante la peatonalización para otorgar vida a la zona que, a priori, debería ser el corazón de la ciudad. Es triste el aspecto que presenta el centro de Marbella, ya no sólo una noche entre semana, es que los fines de semana da pena pasear por la que debería ser el referente de la ciudad (tal y como ocurre en otras urbes de nuestra dimensión, o en capitales de provincia con menor población que Marbella incluso). Un dato es absolutamente esclarecedor: ¿cuántas cafeterías existen en el tramo a remodelar, que comprende más de medio kilómetro? Que yo recuerde, no más de tres. Y ojo, no pretendo tampoco que el “boulevard” resultante se convierta en nuevo comedor al aire libre, como la céntrica Plaza de los Naranjos, pero cafeterías y restaurantes dan siempre vida a las calles.

7) La solución ideal, sobre todo para solucionar el problema de por vida, pasaría por soterrar la circulación, pero técnicamente es algo complicado, y quebrar durante años esa zona sería ya demasiado perjudicial. Y con el ejemplo de San Pedro tan cerca, no es ni asumible ni siquiera pensable.

8) Y por último, como en el proyecto se incluye también la (necesaria) peatonalización de la avenida Miguel Cano ¿qué hacemos con la carga y descarga? Hacer una ciudad habitable, siempre debe incluir aspectos que hagan que lo servicios que en ella se prestan, puedan llevarse a cabo. Y con el alto número de comercios existentes, más todos los que deberían establecerse una vez peatonalizada la zona, debe tenerse en cuenta que debe facilitarse la cuestión a los comercios.

Hay que apoyar la idea, pero siempre que sea pensada, meditada, sopesada, calculada, y siempre aprobada por los vecinos.