Juzgados no

05/07/2016
La visita del Consejero de Justicia autonómico, de la Junta de Andalucía, días atrás, no vino sino a confirmar la situación en la que seguirá la llamada planta judicial de nuestra ciudad. De momento no hay “cuartos” para unificar los Juzgados, que seguirán estando ubicados en dispersos viejos edificios, aunque los últimos abiertos (el séptimo y el octavo, junto al de Violencia de Género) son nuevos, se encuentran en una tercera ubicación a los restantes de Primera Instancia y los de Instrucción, con la falta de operatividad que ello supone, amén de estar situados (al igual que los otros) en un lugar con un grave déficit de lugares de estacionamiento. 

La visita del máximo responsable de la administración con competencias para la gestión de las infraestructuras judiciales supuso algo que, los llamados operadores jurídicos, sabemos hace mucho tiempo, que las distintas sedes judiciales -como decía repartidas por la ciudad- no dan más de sí, por lo que, en un primer lugar, los funcionarios trabajan en pésimas condiciones; los profesionales de la abogacía y la procura tienen que padecer unas vetustas instalaciones; y los justiciables (los ciudadanos) se llevan las manos a la cabeza cuando ven la categoría de dichas sedes (en la línea de otras instalaciones públicas como centros de salud, bibliotecas, etc.)

En este punto es donde, nueva e inevitablemente, sale a relucir el motivo o razón de aquel préstamo de cien millones de euros que otorgó la Junta, y que debemos devolver (como se está haciendo). Entonces, la Junta acudió al auxilio de Marbella, tras la constitución de la Comisión Gestora, poniendo como punto de arranque, la ausencia de inversiones autonómicas durante años, por la presencia gilista en el consistorio.

Por tanto, ahora debemos preguntarnos: ¿si nos dieron los 100 millones, los tenemos que devolver y la Junta sigue sin “poder” invertir en infraestructuras más que necesarias, dónde está la recuperación inversora no llevada a cabo en su momento? Porque otra pregunta es sobre el lugar en donde se encuentran o destinan los millones y millones de euros generados, en forma de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos, que van directamente a las arcas de la Junta. Y ya no sólo en épocas pasadas de bonanza, es que desde finales de 2012, Marbella está nuevamente generando ingresos autonómicos debido a la recuperación del mercado inmobiliario. Y como éste se centra en la denominada “segunda mano”, ese 8% de Transmisiones va para la Junta, cuando no el 9% o el 10%, dependiendo del precio de venta y que en Marbella es más que habitual rebasar los límites establecidos, en 400.000 € y 700.000 € respectivamente, o ese 1,5% de Actos Jurídicos Documentados (del valor total de responsabilidad hipotecaria en los préstamos), también va para las arcas de la Junta.

El consejero Emilio de Llera, por su parte, reconoce que la situación presupuestaria del Ejecutivo regional hace “complicado” dotar a Marbella de estas necesarias instalaciones.

Pero es que, al mismo tiempo existe bastante movimiento en la construcción de nuevos inmuebles, diversos complejos inmobiliarios así como muchas viviendas unifamiliares. En tales casos… más dinerito para la Junta, también en forma de AJD (Actos Jurídicos Documentados) en los títulos de Obra Nueva, cuando se inscriban en el Registros de la Propiedad esos inmuebles en construcción, cuando no lo han hecho a través de los préstamos garantizados con derecho real de hipoteca…

Y ya se sabe que los juzgados de Marbella lideran la tasa de litigios tanto penales como civiles en España. Pero, una vez más, para Marbella no hay “pasta”. Y claro, en este punto, nadie le pregunta al consejero dónde van los ingresos generados y nacidos en Marbella para la Junta de Andalucía… Seguramente, como siempre ha ocurrido, irán dirigidos a la construcción de infraestructuras en cualquier punto de la región menos aquí. Lo he podido ver in situ, ya no sólo los Juzgados de otras localidades, sino los recintos deportivos por ejemplo… muchos construidos con los fondos que Marbella genera, pero que nunca llegan de vuelta en forma de inversiones. Siempre hay trabas y problemas para su llegada…

Me resultó, cuanto menos sorprendente la referencia a la situación urbanística del municipio llegando a asegurar que la anulación del PGOU por el Tribunal Supremo “había hecho una faena a la Junta” y que “de no haberse anulado «hubiéramos podido tener más capacidad de movimiento”. Yo creo que con o sin PGOU, la situación sería la misma pues hemos tenido plan desde 2010 y no han movido un dedo para iniciar esa necesaria construcción de unos Juzgados mininamente acordes a la población, nivel litigiosidad e importancia de esta ciudad. Lo que verdaderamente tiene que aprobarse es la voluntad de mejorar lo que aquí tenemos, cuando es aquí donde se generan muchos recursos. Las ganas, de una vez por todas, de hacer lo que nos corresponde.

Mientras tanto, habrá que seguir padeciendo un viejo edificio para los Juzgados de Instrucción en Avenida Mayorazgo (que hace años, sin duda, eran el epicentro judicial-informativo del país), o seguir usando un edificio habilitado de juzgados pero que no está preparado para ello en Arias de Velasco, o seguir desplazándose a la tercera sede (Calle Doha, en los Arcos de San Enrique), que si bien es moderna y más funcional, tampoco es para tirar cohetes.

Lo dicho, de momento no hay dinero para Marbella, ni para Juzgados ni para nada. Como siempre… 
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