Semanas atrás supimos que el Ayuntamiento de Marbella va a llevar a cabo la deseada a la vez que necesaria sustitución de los vetustos paneles informativos de hora y temperatura, por quince unidades nuevas más modernas y funcionales. La verdad es que esos relojes callejeros que nos encontramos en las principales vías de la ciudad parecen más bien de la serie Cuéntame que del actual 2012, la era de las pantallas LEDS.
El propio concejal de Vía Pública ha reconocido que los actuales soportes están obsoletos, aunque difiero en la edad de algún que otro panel, que sin lugar a dudas tiene más de tres lustros, todo ello porque llevo prácticamente toda la vida viéndolos en el mismo sitio (que no a la misma hora, como decía la canción de Chiquetete). Por ejemplo, el situado al comienzo de Ricardo Soriano, junto a la farmacia Berdaguer, lo recuerdo desde siempre ahí. Incluso, al leer la noticia me ha venido a la memoria algo que escribí hace tiempo en otro medio de comunicación local, en el que mencionaba que en los paneles informativos situados prácticamente frente a frente, en la esquina de calle Calvario y en la esquina de calle Sierra Blanca, ambos también en Ricardo Soriano, en ocasiones existían hasta varios grados de diferencia cuando apenas distan de 50 metros de distancia. Ello es una muestra de lo viejo que son los mencionados paneles.
Casualmente, en Marbella disponemos de la última tecnología en cuanto a información panelada con los mega-monitores existentes en el centro, Puerto Banús y entrada a la ciudad (junto al arco). Por eso choca que pervivieran los añejos relojes-termómetro y que, como todo apunta, tienen un pronto final. Aunque, aprovechando la ocasión, sería interesante que dichas pantallas también pudieran ofrecer a los viandantes información o las últimas noticias (como así ocurre en lugares míticos y universales como el Picadilly londinense o el Times Square neoyorquino).
Lo que de la misma forma llama la atención es que desconocemos lo que ha pasado con la actual concesionaria (por cierto una de las empresas pioneras y líderes en el sector), ya que según se ha afirmado, la conservación y explotación de los paneles ha sido adjudicada a la empresa Mobiliario Urbano por un periodo de diez años más dos de prórroga.
El concejal del ramo, por su parte, ha insistido en la voluntad municipal de poner en orden el entramado de concesiones que hasta ahora existían, pero a mi humilde entender, debería haber explicado las condiciones de la anterior concesión de igual forma que los beneficios que recibe el consistorio con el nuevo acuerdo, al margen de la modernización que se produce con el cambio y saber que el emplazamiento será propuesto por los licitadores previo informe favorable de los técnicos municipales.
Sólo queda esperar que el cambio se produzca lo antes posibles porque los actuales, la hora no es que la den muy puntual… es que la temperatura que muestran a veces es inverosímil.
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