El Marbella FC ha resurgido en el último mes de la mano de David García Cubillo. Una auténtica metamorfosis la que está viviendo el conjunto marbellí ya que el técnico madrileño ha sabido trasladar su mensaje a un vestuario que ha sumado 10 puntos de 12 posibles en esta segunda vuelta y que ya empieza a mirar con distancia la zona peligrosa de la clasificación.
Cubillo ha dado con la tecla en un Marbella que solo ha encajado un gol en cuatro partidos, y éste tanto tuvo que llegar en el tiempo de prolongación ante el Sevilla Atlético, y precedido de una dudosa mano de Bryan tras dos paredes geniales.
Sin embargo, tanto técnico como jugadores consideran justo el empate por lo visto sobre el terreno de juego y confían en poder hacer bueno este reparto de puntos en el choque del próximo domingo ante el Atlético Sanluqueño.
Muy atrás quedan esos partidos en los que los errores iniciales condenaban mucho al equipo. La plantilla ha asumido con claridad el mensaje de Cubillo. Atrás hay que arriesgar lo mínimo. Y es que una portería a cero es garantía de, como mínimo, sumar un punto.
Hay que valorar además la reacción de la plantilla ya que los últimos partidos se han jugado con solo dos de los nuevos fichajes en el equipo titular. El resto son futbolistas que estaban desde el verano y que están sabiendo acoplarse al nuevo sistema.
En este sentido me gustaría destacar tres jugadores. Ismael Gallar merece un reconocimiento por la seriedad y la solvencia con que está jugando. El lateral torreño está creciendo a base de buenos partidos demostrando todas sus cualidades tanto en ataque como en defensa.
Rafa Muñoz también ha ido a más pese a jugar en una posición que no es la suya. Enorme al profesionalidad y contundencia que está mostrando en el lateral zurdo. Hasta el punto de provocar la salida de Peris del equipo y de impedir que por el momento Samu de los Reyes haya debutado.
Por último, el mediocentro Juergen Elitim está demostrando todas las cualidades que se le presuponían anteriormente. Padilla ya confiaba en él y con Cubillo está dando auténticas lecciones de juego. Los partidos la han dado madurez y él ha dado un paso al frente para asumir la responsabilidad en la creación y demostrar también que está preparado para trabajar.
Este Marbella es ahora otro y la afición así lo reconoce. Este domingo habrá una nueva oportunidad de ver al equipo ante el Sanluqueño en un Estadio Municipal Antonio Lorenzo Cuevas que debe empezar a engancharse con su equipo.
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