El lamentable estado que presenta la playa de El Faro de Marbella, que además tiene bandera azul, debería avergonzar a más de uno de nuestros gobernantes en el Ayuntamiento, especialmente al concejal de Playas, Manuel Cardeña, que presume constantemente del buen estado de nuestro litoral, y también al de Obras, Javier García.
Su deterioro es escandaloso, como puede comprobar cualquier persona que se acerque por esta zona y como muestran las fotografías adjuntas.
No cuesta mucho imagen la imagen que se llevan y lo que pensarán los turistas que la visitan, en un destino “cinco estrellas” como debe ser Marbella.
Barandilla de madera carcomida y amenazando con caerse, y paredes con pintura descascarillada. (Foto: J.C.A.)
Lo primero que se percibe al acercase es el deterioro de la barandilla del paseo marítimo durante muchos metros. Oxidada, sin pintura y en un pésimo estado de conservación.
Después, si se opta por bajar por la rampa que está junto al restaurante, de nuevo una barandilla impropia. Está rota en distintos puntos, oxidada y con peligro para que cualquier persona descalza pueda dañarse, o incluso si lleva chanclas.
Además, la pared tiene la pintura descarnada, las tuberías de la ducha al aire y hay rota otra barandilla de madera, carcomida, con una parte que ya se ha derrumbado.
La barandilla en el paseo marítimo presenta este aspecto a la altura de la playa de El Faro. (Foto: J.C.A.)
Se trata de una de las playas más céntricas de Marbella, con bandera azul, algo que quizá debería replantearse el organismo que las entrega, y donde ahora se quiere llevar la estatura de La Venus.
Necesita una actuación urgente, aunque ya estemos fuera de la temporada alta, pero la imagen de Marbella está en juego.