Duante esta primera jornada de declaraciones testificales, una de las más llamativas ha sido la de Alejandro Roa, abogado de Urbanismo quien ha señado ante el juez que "no es habitual" que en un mismo expediente haya varios decretos que no se firmen, como ha ocurrido en el del Funky Buddha.
El letrado ha ratificado que propuso la paralización imediata de las obras, así como el inicio de expediente de restablecimiento de la legalidad y la imposición de multas coercitivas por el incumplimiento de la orden de paralización, aunque estas recomendaciones no se llevaron a cabo.
Roa también dijo que "supone" que el concejal de Urbanismo hizo dejación de funciones al no firmar los borradores de decreto que imponían las multas coercitivas.
Enrique Arrabal
Durante esta mañana también ha declarado Enrique Arrabal, arquitecto jefe del servicio de Disciplina Urbanística, señalado por Pablo Moro como uno de sus asesores en el caso Funky Buddha.
Ha reconocido que algunos de los decretos no se firmaron, aunque nunca habló con el concejal de Urbanismo sobre por qué no lo había hecho, pero el edil sí se interesó por la "posibilidad de legalización".
También ha considerado que "no es habitual" que no se firmen estos decretos y reconoció que tampoco lo había hecho el edil de Obras, Javier García, durante el periodo en que sustituyó a Pablo Moro por vacaciones.
Mario Ruiz
Por lo que respecta a la declaración de Mario Ruiz, director general de Urbanismo, también citado por Moro como asesor en el caso, ha dicho que los decretos de otorgamiento de licencias "nunca pasan" por su mesa, ya que son competencia del concejal.
Sobre los decretos de paralización ha explicado que lo normal es que "vayan directamente" al concejal y ha señalado que no recuerda haber visto ninguno sobre este caso, que conoció "a posteriori". También declaró que no recuerda haber hablado con Pablo Moro sobre la suspensión de las obras.
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