Tras su estreno el pasado sábado 16 de marzo en el Teatro Echegaray de Málaga, dentro del Festival de Cine Español, este viernes le tocaba el turno a Marbella, la ciudad de Pablo Ráez.
Se han vivido momentos muy especiales con el pase del documental, de 94 minutos, que ha hecho derramar lágrimas a los asistentes, con una historia dura, pero con la que se quiere lanzar un mensaje de esperanza a través de la donación de médula.
La cinta está producida por RTVE y por la empresa malagueña Quinta Planta y dirigida por Miguel Ángel Hernández Arango y Vladimir Ráez, tío de Pablo.
Hace un repaso por la vida del joven marbellí, a través de imágenes y de los testimonios de familiares, amigos, de su novia Andrea y de personalidades que apoyaron su lucha como el actor Dani Rovira.
El repaso por su infancia se hace con vídeos, algunos incluso grabados por el propio Pablo de niño. Se escuchan frases como "no era un buen estudiante", "no paraba" o era un "terremoto", en boca de su padre Paco y de su tío Vladimir.
Se plasma su inquietud por los deportes, practicando varios hasta centrarse en el baloncesto y, posteriormente en el crossfit.
El documental narra cómo cambia su vida cuando le diagnostican la leucemia, tenía 18 años, y se inicia su lucha que, en principio, tiene final feliz, ya que el primer trasplante le devuelve a la normalidad.
La recaída es un momento duro y más aún la búsqueda de un nuevo donante, que consigue hacer viral a través de las redes sociales.
En definitiva, todo un homenaje y un reconocimiento a su aportación, sin duda vital, a favor de la donación de médula, que logró incrementar de manera exponencial en toda España.
En el pase del documental ha estado presente el consejero de Salud de la Junta, Jesús Aguirre, junto a la alcaldesa, Ángeles Muñoz, y miembros del equipo de gobierno.
También han acudido los concejales del PSOE José Bernal y Blanca Fernández, y el de Izquierda Unida, Miguel Díaz, acompañado por Carmen Varo.
Presencia también de Ciudadanos (Cs) con la delegada provincial de Turismo de la Junta de Andalucía, Nuria Rodríguez, y la parlamentaria Teresa Pardo, entre otros miembros.
El consejero Aguirre ha recordado que gracias a Pablo Raéz "se disparó la donación de médula" y que en Málaga "fue espectacular", ya que se multiplicó un 1.300 por 100 y gran parte de los donantes son "personas sensibilizadas gracias al mensaje que él transmitió".
"Por desgracia ya no está con nosotros, pero nos ha dejado un gran regalo, como que el año pasado hubiera 500 trasplantes de médula o que el volumen de voluntariado se dispare", ha afirmado.
Y ha realizado un llamamiento: "hay que donar medula, sangre u órganos porque es dar vida a los demás".
Pablo Ráez falleció en Marbella el 25 de febrero de 2017 a los 20 años como consecuencia de una leucemia, tras dos transplantes y una incansable lucha que sirvió también para concienciar a miles de personas sobre la necesidad de donar médula.