Álvarez Morán ha sido el blanco de todas las críticas por parte del Eldense. Su actuación indignó al conjunto alicantino, cuyos jugadores lo rodearon y zarandearon en varias ocasiones, sobre todo tras la dos acciones más polémicas, la expulsión del portero y el penalti en el último minuto.
El Marbella le reclamó un penalti a Pibe en el minuto 35, que pareció bastante claro. También el Eldense pidió otro, que igualmente fue, de Manolo Reina sobre Marcos Campos en el minuto 69. En ambas ocasiones daba la impresión de que los había pitado, pero finalmente su brazo señalaba saque de puerta.
Al margen de estas jugadas, una para cada equipo, dos más marcan su actuación. En el 66 mostró tarjeta amarilla al portero Alberto, por demorar un saque de puerta. Tres minutos después, lo expulsó al considerar que había tocado el balón con la mano fuera del área.
El Eldense se quedaba con uno menos, sin cancerbero, ya que había realizados los tres cambios, y Pagán se ponía bajo los palos. En el saque de la falta marcaba el Marbella y forzaba la prórroga.
Aridane, que terminó expulsado, fue uno de los que más protestó. (Foto: J.C.A.)
Y la segunda acción que principalmente reclama el cuadro visitante es el penalti que pitó en el último minuto de la prórroga, por un agarrón muy dudoso sobre Airam. Ahí se desató la locura, con los jugadores eldenses rodeándolo, también gente que saltó desde el banquillo e incluso algunos aficionados visitantes.
Antes de que se lanzara el penalti, el colegiado advirtió que, se marcara o no, el partido estaría concluido. No pudo ni pitar, porque hubo invasión de campo por parte del público local para celebrarlo.
Mientras tanto, Álvarez Morán tenía que ser escoltado por cerca de diez policías, la mayoría nacionales pero también alguno del cuerpo local. Recorrió así todo el fondo norte y preferencia por la pista de atletismo, ante los intentos de agresión por parte de algunos aficionados visitantes y jugadores del Eldense, hasta que consiguió ganar el túnel de vestuarios.
En el acto reflejó las dos expulsiones durante el juego, las de Alberto y Marcos Campos, ambas por doble amarilla. Además, en el minuto 104, tras el 2-0 que marcó Pibe, expulsó a un jugador del banquillo visitante, Algaba, por dirigirse a uno de los asistentes diciéndole "sois unos ladrones, habéis robado nuestro partido".
Dos aficionadas o familiares del Eldense recorrieron el campo para acercarse al árbitro. (Foto: J.C.A.)
Al finalizar el encuentro, expulsó a Aridane, uno de los que más le protestaron en todo momento, por "dirigirse a mí gritando ¡te voy a matar, hijo de puta!, teniendo que ser sujetado por las fuerzas y cuerpos de seguridad".
También reflejó en el acta que durante la celebración de los tres goles del Marbella "varios aficionados invadieron el campo". Al finalizar el encuentro hubo "invasión de campo por multitud de aficionados, teniendo que abandonar el terreno de juego escoltado por la policía". Realmente, tuvo ser protegido porque querían agredirle los jugadores visitantes, los seguidores locales saltaron para celebrar el ascenso.
Por último, en el acta también puso que, en el vestuario entró un antiguo presidente del Eldense, Miguel Guill, quien "me sujetó de la camiseta y me zarandeó diciéndome ¡eres un ladrón, hijo de puta!".
Y un último detalle, el colegiado le da el primer gol de Marbella a Pibe, que figura con dos en el acta. El argentino saltó junto con Airam, aunque fue este último el autor y el que lo celebró quitándose la camiseta.
Adrián (número 4), es sujetado por un policía. En la imagen se pueden contar hasta diez policías. (Foto: J.C.A.)