Fuera vallas

01/03/2016
En días pasados, todos hemos podido comprobar el inicio de las, ansiadas y necesitadas, obras de remodelación en la céntrica Avenida del Mercado. El fundamental eje norte-sur precisaba de un remozo sobre todo en cuanto a amplitud de aceras así como en cuanto a mayor y mejor iluminación. 

Una vía transitada diariamente por miles de vehículos así como cientos de personas, más aún desde la puesta en funcionamiento del centro deportivo de Miraflores. La subida y bajada peatonal, sobre todo en el margen izquierdo, bordeando el Parque de Rio Huelo, a veces se convertía en toda una exposición al peligro por la ínfima anchura de acera y la baja densidad lumínica.

Pues bien, estamos de enhorabuena. Días atrás se presentaba públicamente el proyecto consistorial de remodelación de dicha Avenida del Mercado. Pero cuál fue mi sorpresa (y supongo que la de todos los vecinos, ciudadanos y lectores), cuando comprobé que apenas horas después del anuncio, por parte del Alcalde y la responsable municipal de Obras, el vallado rodeaba la antedicha zona verde y, más aún, comenzaban las obras.

Los bocetos hechos públicos presentan un parque sin vallas, abierto a los ciudadanos, dotando de mayor amplitud de aceras (del apenas metro actual se pasa al triple de anchura), nueva luminaria “led” (en consonancia con los tiempos y el consumo). Este medio, Marbella24horas, publicó las imágenes, sin duda llamativas, que explican de manera extraordinaria, el resultado final (http://www.marbella24horas.es/local/rio-huelo-y-la-avenida-del-mercado-se-uniran-en-un-moderno-bulevar-14037).

Otra de las buenas nuevas es la creación de plazas de estacionamiento. Y digo que es algo positivo porque cuántas veces, al menos en este espacio de opinión, se han reclamado la creación (y no constante supresión), de espacios para dejar eso que nos permite movernos y desplazarnos y que, cuando uno llega a un sitio (o a su hogar), no tiene donde dejarlo. Muchas han sido las calles en Marbella en la que han desaparecido los lugares de estacionamiento. Por eso, cuando se crean esas plazas de aparcamiento, las cuales espero, deseo y casi exijo, que sean libres y no pintadas con líneas azules o verdes… no puedo sino alegrarme, sobre todo por el bien de mis convecinos, que se arman de paciencia a veces para poder dejar el coche aparcado tras todo un día de trabajo.

Otro aspecto positivo, y sin duda plausible, es la supresión de la histórica valla que circundaba el parque, delimitando su acceso a ciertas horas. Precisamente, en una reciente tertulia de radio, comentaba con mi compañero -a la sazón, editor de Marbella24horas, Juan Carlos Angulo- la inexplicable existencia de cierre y vallado en todos los parques de la ciudad, cuando normalmente los parques, en otros lugares, son espacios abiertos. Por un lado, y así lo comenté en la referida tertulia, podría responder esa medida a la cobertura ante posibles actos vandálicos con nocturnidad (y casi alevosía), y por ello pudiera entender que el Parque de la Constitución o del Calvario tuvieran un perímetro vallado, aunque otros como la Represa o La Alameda (que es paseo y no parque…) están abiertos sin limitación perimetral alguna, y nada ocurre en esos lugares.



Respecto a la apertura, que aplaudo, desde fuentes consistoriales, se afirma que responden “al concepto de amplitud, de reordenación urbana y de acercar los barrios al centro a través de grandes avenidas y espacios para disfrute de los ciudadanos". Me parece, sin duda, correcto ese concepto. Todo lo que sea positivo para Marbella, tendrá mi conformidad, con matices o sin ellos (cuando los haya, no dudaré en manifestarlos, como habitualmente hago). No entro, eso se lo dejo a los políticos y personas interesadas, en qué empresa hace la obra, aunque pienso que debería siempre ser una entidad local. Por eso, en los pliegos para optar a esos concursos, debería puntuar de manera extraordinaria y especial (siempre con salvaguarda de la legalidad y normativa administrativa), que la optante tenga domicilio social en Marbella, acreditada de manera duradera, que posea trabajadores con prolongado empadronamiento marbellí, etc.

Ahora bien, y como no lo he podido ver en los bocetos de la obra que se han publicado, aconsejo que la zona deportiva de Rio Huelo, en pro de la seguridad de vehículos y peatones, deberá contar con un vallado, al menos la pista polideportiva, ya que todos sabemos lo que pueden suponer balones sueltos por una calle con alta densidad de tráfico. Además, el acceso a instalaciones deportivas municipales debe estar regulado de alguna forma, ya no sólo por la salvaguarda en la integridad de los usuarios, sino para mantener en óptimas condiciones las mismas.

Por eso, vallas fuera… aunque en ciertos puntos, no. 
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